Salir a dar la cara después de perder un derbi no es tarea fácil para nadie, por lo que la silla de la sala de prensa de la Ciudad Deportiva del Sevilla FC estaba ayer más caliente que nunca.
Esos grados fueron perfectamente reflejados en las palabras de José Ángel Carmona. Sin ir más lejos, su primera frase fue: “Estamos jodidos, al final perder este partido siempre duele más que cualquier otro”.
Aunque no contasen con la plantilla completa hasta el jueves previo, el lateral derecho no quería poner excusas, haciendo especial hincapié en la pésima segunda parte que llevaron a cabo, donde “no estuvieron a la altura del escudo que llevan”.
Cuando le preguntaron por la relación del vestuario con Xavi García Pimienta, el canterano no dudó en defenderlo. Sin embargo, más tarde aseguró que “plantearon el partido de una forma y después no se dio” y que “no tenían planteado un plan B en el momento que se pusieron por debajo en el marcador”. Una cuestión cuya responsabilidad cae directamente en las manos del técnico sevillista.
Es decir, en un duelo donde era muy probable que la cosa se les pusiera cuesta arriba, la plantilla no tenía una hoja de ruta para intentar darle la vuelta a la situación.
Pimienta vuelve a salir señalado indirectamente, al igual que tras las palabras de Badé en la zona mixta post derbi, donde el francés estuvo muy crítico con la actitud ofensiva de su equipo, ya que la personalidad brilló por su ausencia. “Si no atacas, no tienes la pelota, ellos van a crear cosas. No hemos hecho nada, sólo defender. Cuando juegas así seguro que no vas a ganar nada”, expresaba el defensa central.
Una falta de personalidad que también ha criticado Carmona. Tuvieron una oportunidad de intentar mantener el resultado y la desaprovecharon al creer que el partido se iba a acabar en el minuto 20. “Ya nos ha pasado varias veces este año, nos ponemos por delante, como en el campo del Atlético y al final nos echamos atrás y lo acabamos siempre perdiendo”, explicaba el jugador nacido en El Viso del Alcor.
Unas declaraciones más que se oponen a las decisiones del míster. Según él, “es hora de que en estos últimos nueve partidos no les vuelva a pasar y que deben dar un paso adelante”.
De lo contrario, el sueño europeo puede estar más lejos de lo que se pueda imaginar, aunque es verdad que las matemáticas no engañan, sólo le separan cuatro puntos. La posibilidad está ahí y según el visueño es “más alta de la mucha gente se piensa”.
Al fin y al cabo, Carmona es un sevillista de cuna, que siempre ha visto al Sevilla estar arriba. Por eso, esta mala racha le duele, porque la meta final la tiene entre ceja y ceja: “Mentiría si te digo que mi objetivo no es clasificar para Europa”.
A él le gustaría ser más regular, pero para ello tienen que cambiar muchas cosas. La primera de ellas, entenderse con García Pimienta, para que este pueda seguir el proyecto que tiene firmado hasta 2027.
