Fabrice Pastor presentó ayer el evento de A1Pádel que tendrá lugar en Sevilla el próximo mes de junio, pero su comparecencia ante los medios se centró en la posibilidad de coger las riendas del Sevilla FC.
“¿Quién no piensa en eso a día de hoy? Yo creo que el club está viviendo un momento que no es el suyo”, declaraba el monegasco. Aunque también ha aclarado que él no podría ser presidente del club fiscalmente dado que no vive en la ciudad hispalense, pero sí que podría llevar la gestión.
En todo caso aplaza dicha decisión hasta el mes de julio, ya que primero tiene que tramitar todos sus negocios en el mundo del pádel. Porque llevar las dos cosas a la vez “le complicaría mucho a vida”.
Pero la dificultad de su objetivo no es un obstáculo para él: “Es más un tema de orgullo personal por amor a la ciudad y al club”, afirmaba el exitoso empresario.
Su relación romántica con el conjunto de Nervión hace que le duela la situación actual y desea que el final del curso sea mejor. Por eso le da un tirón de orejas a los actuales gestores diciendo que “hay que espabilar, tener un proyecto de club y dejar de hablar de las personas”.
Uno que sí parece tener un plan de acción para rescatar al Sevilla es Antonio Lappi, otro afamado hombre de negocios, que conforma junto a otras personalidades como Federico Quintero la llamada tercera vía sevillana. Ante esta posible competencia, Fabrice Pastor ha declarado que “el primero que llegue y lo haga será el ganador”.
Se ve que si llega a gestionar la entidad blanquirroja no quiere compartir su trozo del pastel, asegurando que él aportaría una visión diferente e internacional, similar a la que ha llevado a cabo con A1Pádel. De todas maneras, habrá que esperar mínimo hasta julio para saber las intenciones de este monegasco.
