El coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, ha mostrado la intención de su formación de "darle la vuelta" al sector público a través de medidas "ajustadas" a la realidad de cada empresa pública, que serán de "carácter diverso y que no tienen que ejecutarse siempre con traducción en despidos". "Ni mucho menos", ha apostillado.
En una entrevista concedida a Europa Press, Maíllo ha explicado que ya se ha constituido la comisión de trabajo que abordará "ente a ente" la situación del sector público y que ésta comenzará sus trabajos con el nuevo año 2014. "Hay una gran responsabilidad de afrontar con toda transparencia un recorrido por el sector público para abordar las medidas que correspondan", ha añadido.
El dirigente de izquierdas, que ha insistido en que las medidas que se adopten serán "a la carta y no un menú igual para todos", ha señalado que en la certeza del diagnóstico estará "la justicia" de las medidas que se tomen y que éstas serán de "carácter diverso". Además, ha destacado la necesidad de que las empresas deben adecuarse al objetivo para el que fueron definidas.
"Y si hay entes que no se supo ni para qué fueron fundados, pues habrá que tomar las medidas que correspondan", ha manifestado el líder de IULV-CA, quien ha garantizado que se va a hacer un trabajo
"muy sensible y delicado" con la situación de las empresas, "pero siempre desde el conocimiento exhaustivo y la transparencia en la información de cada ente".
"USO CLIENTELAR" DEL SECTOR PÚBLICO
En este contexto, Maíllo ha dicho compartir la "revolución administrativa" que reclama el Partido Comunista de Andalucía (PCA), así como la aseveración de que por parte del PSOE-A ha habido en el pasado un uso clientelar del sector público. "No siempre, y sin hacer generalizaciones, pero es evidente que ha habido un uso de las empresas públicas en contrataciones de militantes del PSOE-A", ha subrayado.
Finalmente, ha pedido "prudencia" y actuar con "juicio, serenidad, firmeza y coherencia" en esta nueva reordenación del sector público, en la que hay que "escuchar a todos". En su opinión, se trata de un colectivo que ha sido "objeto de conflicto durante mucho tiempo" y que tiene que responder ante la sociedad cumpliendo las funciones para el que fue creado.
