El histórico líder del Partido Andalucista (PA) y exalcalde de Sevilla Alejandro Rojas Marcos ha intervenido en el 17 Congreso Nacional que, con carácter extraordinario, dicha formación celebra este sábado en Torremolinos (Málaga), y donde se debate una propuesta de la dirección para poner punto y final a los más de 40 años de historia del partido que ahora dirige Antonio Jesús Ruiz. Allí, Rojas Marcos ha aseverado que "hoy desaparece el PA, pero el andalucismo no morirá".
En una alocución dirigida a sus "compañeros del alma", Rojas Marcos ha insistido en que "el Partido Andalucista se retira, pero los andalucistas ni nos retiramos, ni nos rendimos". En esa línea, ha afirmado que "un día Blas Infante desapareció, pero no murió el andalucismo. Hoy desaparece el Partido Andalucista, pero el andalucismo no morirá".
Ha pedido comprensión hacia esa decisión de la formación, porque "los andaluces le vienen rechazando una vez y otra". "En vez de que el Partido Andalucista lo acepte y se resigne, ¿no será más digno y más noble que te presente su dimisión?", ha preguntado el histórico líder de los andalucistas, que quieren a Andalucía "libre, libre, libre".
Dirigiéndose a los asistentes al congreso, les ha dicho que no han venido a esa cita "a agachar la cabeza, sino a levantarla". "Habéis venido a gritar con fuerza '¡hasta aquí hemos llegado!'", y "como quien pone una pica en el camino a la cima, en un lugar al que nadie antes consiguió llegar, para colgar de ella el testigo que un día otros habrán de recoger".
"Nuestro grito de hoy es la voz de los miles de militantes y los millones de votantes con los que caminamos durante 50 años luchando por un poder andaluz", ha abundado Rojas Marcos, que ha defendido que "el Partido Andalucista nació para liberar a un pueblo que no le entendió, cuyo apoyo fue escaso y con muchas, muchas, muchas condiciones".
Según Rojas Marcos, los andalucistas se empeñaron "en convencer a Andalucía de que había que conquistar poder andaluz, y debíamos haber empezado por ayudarle a abrir sus propios ojos". "Quisimos investir de poder al pueblo andaluz por la cabeza y teníamos que haber empezado por investirle por los pies", ha remachado.