Fuentes de la compañía aseguraban ayer que esos trabajos se están desarrollando con absoluta normalidad. Hasta ahora, las obras se han centrado en el movimiento de tierras, la urbanización de la superficie y la cimentación del edificio principal del complejo comercial. Será en los próximos meses cuando pueda advertirse ya la presencia de las primeras estructuras que darán cuerpo a este gran establecimiento. De manera paralela, en septiembre, dará comienzo el proceso de selección de la plantilla, que estará integrada por unos 300 trabajadores. En cualquier caso, Ikea anunciará convenientemente el inicio de dicho proceso.
La apertura de la tienda no implicará en cualquier caso la culminación de todo el complejo comercial, que como se sabe se extiende sobre una superficie de 150.000 metros cuadrados, de los cuales Ikea ocupa sólo 36.000. En ese centro comercial paralelo está prevista la instalación de unos 60 operadores. La intención de la multinacional sueca -que es la que promueve todo el complejo- es que la apertura de Ikea coincida con la de una parte “consistente” de ese proyecto paralelo.
