Huelva está cambiando esa actitud pasiva que durante años nos ha caracterizado y está mostrando su lado más rebelde. Ayer 15 de enero, esa Huelva activista, indignada y con ansias de cambiar las cosas volvió a llenar las calles de esta ciudad para mostrar su indignación con la precaria sanidad existente que recibe.
La plataforma #Huelvaporunasanidaddigna, no conforme con las respuestas políticas recibidas tras su última Marea Blanca del 27N, ha logrado convocar a tanta gente que tiene confundido al personal a la hora de contabilizar los asistentes; como siempre, un juego político que, sinceramente, empieza a importar poco.
Pero más allá de las dudas -aquellos que prefieren crearlas- la realidad está presente en las centenares de imágenes que pululan por las redes, orgullosas y satisfechas por volver a crear unión, sentido de pertenencia y una conciencia social que empieza a ser latente en muchos otros aspectos de esta sociedad onubense del fútbol, Rocío y flamenco, como algunos la habían equivocadamente apodado.
El despertar de la fuerza onubense -guiño cinéfilo incluido- está teniendo su origen en las redes, donde el activismo está logrando su mayor repercusión; concretamente, esta plataforma en Facebook cuenta con más de 26.000 miembros, un hecho que se debe tener en cuenta y que comienza a preocupar a algunos y de los que espero, no se aprovechen otros. Cabe recordar, que ya son dos veces las que está plataforma ha logrado gritar su rabia y, no pararán hasta conseguir sus objetivos, los que Huelva se merece. Pero no es la sanidad la única preocupación que alberga en esta ciudad y vuelven a ser las redes los instrumentos de comunicación más directos y de las que se nutre la desesperación constante que vivimos.
Como dije en aquel artículo de opinión motivador tras el 27N, A Huelva la están cambiando y es un orgullo ser partícipe de ello.
