Dos jóvenes de 18 y 24 años han sido detenidos por la Guardia Civil en la Barriada El Palomar, en Sanlúcar, acusados de un delito contra la salud pública. El motivo: cultivar marihuana en los domicilios donde residen.
Aprovechando la estructura de los edificios, con un patio interior, los jóvenes habían recreado un perfecto invernadero para el cultivo del cannabis, al que cuidaban con diferentes productos de abono que la Guardia Civil intervino en sus domicilios.

En uno de los domicilios, incluso, se habían llegado a levantar las losas del patio con el objetivo de sembrar las macetas directamente en la tierra. Además, había varias plantas sembradas en macetas cuya frondosidad era visible incluso desde el exterior de las viviendas antes de que la Guardia Civil interviniera. Algunas de las plantas intervenidas superaban los dos metros de alto.

En total los efectivos del Instituto Armado intervinieron un total de 92 kilos, que estaban repartidos en 18 plantas de marihuana, tres en una de las viviendas y quince en la otra.


MÁS CONTROL

La vigilancia de los efectivos policiales sobre el cultivo de cannabis se intensifica en estas fechas, cuando los cogollos de la planta se encuentran en su plena madurez. Un control que se lleva a cabo con más precisión sobre invernaderos y campos de cultivo, pero el cultivo de cannabis ya se ha extendido también a los domicilios particulares que, como en el caso, habían sido habilitados para cultivar la sustancia estupefaciente y comercializarla posteriormente. En el mercado, las plantas intervenidas habrían alcanzado los 276.000 euros.

Además, junto a las plantaciones - que estaban perfectamente clasificadas con etiquetas - y el material de abono, los agentes de la Guardia Civil de Sanlúcar encontraron en uno de los domicilios 320 gramos de hachís, por lo que tanto J.B.G. de 18 años como M.P.R., de 24 años, fueron denunciados por un delito contra la salud pública.