Satisfechos tras el encuentro mantenido el miércoles en Madrid con el Ministerio de Industria, al que el secretario comarcal de UGT, Pedro Alemán, calificaba de “muy satisfactorio”, la marea azul continuó ayer preparando el calendario de actos reivindicativos.
En primer lugar, será mañana mismo cuando los trabajadores, afectados y todos aquellos que quieran sumarse al acto protagonicen una sentada en la Plaza del Arenal a modo de protesta, para la que esperan contar con todo el apoyo de la ciudadanía.
Asimismo, y a una semana vista, trabajarán por lograr, el sábado siguiente, 10 de octubre, que un mosaico humano llene los terrenos del botellódromo de Chapín, y que a base de cartulinas de colores azul y blanco formen el lema de “Vicasa no se cierra”, “de tal manera que pueda ser visto y leído hasta desde el aire”, como así informó ayer a este medio el secretario comarcal de UGT.