“Buena” y “ejemplarizante”. Así califica el portavoz del gobierno municipal, Ángel González, la rebaja del 30% del sueldo de altos cargos de Aguas del Torcal. Como recueda, esta medida no sólo va a suponer a las arcas municipales un ahorro del 150.000 euros al año, si no que también va a contribuir a la viabilidad de la empresa pública y por lo tanto a sus puestos de trabajo.
Igualmente, gracias en parte a ella, se ha pasado de tener que tomar otras decisiones más difíciles a garantizar que las operaciones de crédito y la deuda financiera sigan dentro de los límites asumibles por Aguas del Torcal.
González es consciente de que a nadie le gusta que le bajen el salario, pero también recuerda que a la ciudadanía tampoco estaría contenta si tiene que mantener sueldos altos en tiempos de crisis. Por ello considera que era absolutamente necesario adecuar estos salarios a la realidad, siguiendo para ello, como asegura, un criterio muy razonable: “Si todos hacemos un esfuerzo en un momento importante en el que tenemos además que mirar por el dinero público más que nunca, y trasladarle a la opinión pública que se hace un uso responsable de los recursos municipales, la empresa de aguas no podía ser menos”.
Para el portavoz municipal, no tenía mucho sentido que una sociedad pública que pasara por dificultades económicas mantuviera salarios altos a ciertos directivos. Además, tampoco se hubiera entendido que cobraran más que el propio alcalde, que también en su día ya se rebajó el sueldo un 30%. “Estábamos hablando de un sueldo que no se correspondía con la realidad que estamos viviendo en Antequera”, subrayó en una reciente comparecencia.
Asimismo, González entiende que también había que estrechar la diferencia entre las nóminas de los altos cargos y del resto de los trabajadores. “Esto hace que la gente que están también al pie del cañón vea que el esfuerzo no se realiza en la capa más baja de la empresa y si también viene aparejado en igualdad con los gerentes de la empresa”, aclaró.
