"Cuando se propone algo, no se rinde", explicaba un allegado de Moss al diario 'The Sun'. Pero comprar una isla no es como comprar gominolas y la modelo británica tendrá que conocer primero la opinión el gobierno local de la isla y, por qué no decirlo, la del propio Berlusconi, quien quizá estuviese encantado de contar con una atractiva millonaria como dueña de la isla.
Por si no consigue la isla entera, "Kate está entusiasmada con un terreno y ha ofrecido al pescador propietario una suma considerable de dinero", aunque es bastante probable que se trate tan sólo de una decisión pasajera motivada por las vacaciones de Moss en la zona.
Se trata de una isla muy turística y tranquila, pero lo que Kate no ha tenido en cuenta es que el 'afrodisíaco paraíso' incluye también un volcán que está activo y que tuvo la última erupción en 2006, cuando generó dos derrumbamientos de tierra y un tsunami.
Además, en 1930, cuando tuvo lugar la mayor erupción volcánica de la zona, cayeron bombas con la lava del volcán, que mataron a varios residentes y destruyeron algunas casas de la isla.
KATE ES GAFE CON LAS VIVIENDAS
Aunque se trate de un entorno precioso, la modelo debería considerar todos los inconvenientes que tiene el vivir allí, en especial cuando Kate es propensa a atraer las desgracias sobre sus lugares de residencia.
Hace tres meses robaron en la mansión londinense que comparte con su novio, Jamie Hince. Moss perdió, entre otras cosas, un cuadro original de Banksy valorado en 140.000 dólares (105.000 euros). Cuando aún no lo había asimilado, días más tarde la casa se inundó con aguas residuales, lo que le supuso 200.000 dólares (151.000 euros) en daños.
Pero su mansión en Londres no es la única que confirma la mala suerte de Kate. En septiembre de 2008 la modelo se volvió loca cuando volvió de unas improvisadas vacaciones en Ibiza con su novio y se encontró con una plaga de pulgas, que habían afectado también a sus dos gatos persas. La plaga había sido causada, sorprendentemente, por una bandada de palomas que habían irrumpido a través de las ventanas de la vivienda. Inmediatamente tuvieron que fumigar.
En otras ocasiones también han tenido problemas con los vecinos debido al hedor de sus alcantarillas y de una tapia que se derrumbó. Es tan extraño todo lo que les ocurre, que Kate y Jaime han llegado incluso a pensar que necesitaban un exorcista profesional para limpiar su casa de "malas energías".