Un trabajador de la empresa RD Post ha sido despedido tras haber estado de baja durante la cual tuvo a un investigador privado siguiendo todos sus pasos, tal y como este medio ha podido saber a través de fuentes cercanas al proceso, las cuales tachan lo ocurrido como una supuesta “una persecución sindical en toda regla”.
Hay grabaciones de él en el coche, en el parque o en el centro de salud. Hay anotaciones que comenzaban a las 06.39 horas de la mañana en la que se indicaba que se había encendido la luz de la vivienda del trabajadorPero vayamos por parte. RD Post es una empresa de gestión integral del proceso postal que actualmente se encarga de dicho cometido en el Ayuntamiento de Cádiz tras ganar el concurso de concesión del mismo en 2019. Se encarga, por lo tanto, del reparto de las notificaciones y mensajería que emite el Consistorio.
El trabajador despedido fue subrogado por dicha empresa tras hacerse con el servicio y formaba parte del comité de empresa. Era pues, representante de los trabajadores.
En un momento dado, el empleado tuvo que cogerse una baja por problemas en una rodilla y ahí comenzó la presunta persecución por parte de la empresa. Según ha podido saber este medio, durante la baja le estuvo siguiendo un investigador privado, al parecer contratado por la empresa.
El investigador presentó un informe “totalmente surrealista”, con fotos del empleado andando, conduciendo, en su casa, en el parque, yendo a la clínica, de compras solo o con su mujer, e incluso imágenes dentro de su casa, a través de la ventana, cuando se estaba vistiendo, hablando junto a su mujer… de tal manera que si el hombre iba a un mercadilla “el investigador iba detrás de él”.
También hay grabaciones de él en el coche, en el parque o en el centro de salud. Hay anotaciones que comenzaban a las 06.39 horas de la mañana en la que se indicaba que se había encendido la luz de la vivienda del trabajador. Hay también detalles de los metros que recorría andando al parecer calculados con GPS. Todo un informe en el que se cuenta desde que llega el investigador privado a su casa hasta que lo abandona hasta el día siguiente. Incluso se detalla si llovía o no el día en cuestión.
Además de denunciar dicha presunta persecución sindical, fuentes aseguran que para “colmo” la empresa “no cumple su pacto con el ayuntamiento, con retrasos en los plazos de entrega, y problemas con los acuses de recibo”, amén de “incumplimientos labores detectados por la propia inspección de trabajo… algunos graves como incumplimientos del convenio colectivo a cuestiones relacionadas con riesgos laborales, vigilancia de salud y prevención”, tal y como confirman fuentes consultadas por este medio.