La cala de La Aguadilla, en Algeciras, ha sido el espacio litoral elegido por la coordinadora contra la droga Barrio Vivo para llevar a cabo una jornada de limpieza de la costa. Esta actividad, integrada en el proyecto preventivo contra las adicciones a través del ocio educativo-emocional Emociónate con Barrio Vivo, ha estado dirigida y coordinada por técnicas de la ONG.
En ella, han participado jóvenes voluntarios que en este mes de julio asistieron al curso de Monitor de ocio y tiempo libre que Barrio Vivo organizó dentro del Programa de Ocio Educativo Emocional del Ayuntamiento. Esta zona, ubicada entre la playa de Getares y La Ballenera, es de gran importancia medioambiental. El trabajo realizado ha dado como resultado la recogida de un total de diez bolsas pequeñas y otras cuatro grandes de resíduos: microplásticos, plásticos, restos de vidrio de botellas, latas de refresco y cervezas etc...
Esta acción de Barrio Vivo tuvo como objetivo “no solo la limpieza en sí del litoral sino, y lo que es muy importante, concienciar a la ciudadanía y especialmente a los jóvenes del valor ambiental, del patrimonio geológico que tenemos en esta comarca”, indicó Carmela Berrocal, responsable de dinamización emocional de la coordinadora. Un enclave donde el protagonismo de los flysch se hace patente.
Belén Toba, bióloga y exprofesora, explicó la importancia de preservar esta joya creada a través de capas de caliza, marga y arenisca. Los flysch del Campo de Gibraltar, “nada valorados” y los existentes en la costa vasca, entre Deba y Zumaia, “muy valorados”, son los únicos ejemplos existentes en España.
Los flysch se remontan a hace millones de años. Lo que vemos es el resultado del choque de placas entre África y Europa. Estas plataformas de abrasión son de una riqueza muy importante a nivel paleontológico. Aquí se encuentran icnofósiles, huellas de animales que vivieron sobre el fango, o turbiditas, que son sedimentos depositados en los fondos.