El Ayuntamiento de Castellar (Cádiz) ha conseguido la cesión de 24 hectáreas de la finca de La Almoraima para el desarrollo de proyectos industriales, agrícolas y ganaderos.
Según indica el Consistorio en una nota, el pasado viernes el alcalde de Castellar (IU), Juan Casanova y la concejal de Turismo y Bienestar Social, Pilar Lobato (PP) han celebrado una reunión con el secretario general de Agricultura, Carlos Cabanas, a la que también han asistido Antonio Sanz, presidente del PP de Cádiz y la directora general de Desarrollo Rural, Begoña Nieto.
Esta reunión, recuerda el alcalde, es la culminación de un proceso que se inicia en 2011 en la que se plantea al Ministerio de Agricultura "la necesidad de crear riqueza y empleo a través de la industrialización sostenible y la diversificación de la actividad económica en todo el término municipal y especialmente en la finca de La Almoraima".
En los diversos encuentros celebrados se ha desarrollado "un clima de diálogo que ha permitido que el Ministerio haya decidido atender las demandas del equipo de gobierno municipal".
Las parcelas que se ha decidido que sean cedidas al pueblo de Castellar a través de su Ayuntamiento han sido dos. La primera alberga doce naves abandonadas desde hace unos 50 años y que albergaban una instalación militar. Estas naves han sido reivindicadas desde entonces por los vecinos por su situación estratégica para el desarrollo de proyectos turísticos, fundamentalmente.
La segunda se encuentra en el entorno conocido como Santa Clara, junto a la carretera de Castellar a Jimena y antes de llegar al cruce con el Tesorillo. Esta parcela es la que, desde el Ayuntamiento, se ha estado apuntando como la idónea para instalar un polígono medioambiental verde que permita la ubicación de industrias de transformación agrícola/forestales, por ejemplo, una planta de biomasa para generar energía eléctrica o industrias de transformación de productos agroganaderos.
Tanto el alcalde, Juan Casanova, como la concejal Pilar Lobato, han mostrado su satisfacción por "la sensibilidad que han demostrado en el Ministerio de Agricultura con la situación tan complicada que se está atravesando en el municipio chisparrero". Así, consideran que el diálogo entre administraciones públicas basado en el sentido común "es lo que se nos está exigiendo desde la ciudadanía que espera de los políticos acuerdos que se dirijan hacia el bien común".
El alcalde ha puesto de manifiesto el reto que se plantea a partir de ahora para "conseguir los recursos necesarios para hacer realidad el sueño de un pueblo de explotar sus propios recursos para salir de esta crisis económica tan pertinaz".
