Se inicia un incendio en los setos que rodean a una guardería. Las primeras llamas sólo son advertidas por dos niños, de 12 y 13 años, que se encuentran en las inmediaciones. Sin dudarlo un instante, los dos jóvenes corren en busca de cubos de agua a una obra cercana y logran, por sus propios medios, controlar el incendio y evitar que se propague. Estos hechos, que bien podrían ser el argumento de cualquier serie televisiva, son reales y sucedieron el pasado 7 de mayo en la barriada Recreo San Pedro. Los protagonistas de esta heroica actuación fueron Joaquín Aragón y David Toro, el primero con alma de Guardia Civil y el segundo de Bombero. Quizás fueron sus respectivas vocaciones las que les empujaron a actuar de inmediato. Sea como fuere, lo cierto es que la rápida intervención de estos niños evitó, según han reconocido las fuerzas de seguridad que se desplazaron hasta el lugar del suceso, que el incendio alcanzara mayores proporciones. 

El Ayuntamiento les rindió ayer un homenaje en señal de agradecimiento. Durante el acto, el alcalde de la ciudad, José María Román, destacó que “la actuación de estos niños es un ejemplo de civismo y colaboración ciudadana que bien merece un reconocimiento público y la gratitud de todo el pueblo de Chiclana”. Román obsequió a los dos jóvenes con un MP4 en agradecimiento a esta hazaña.

Actuación decisiva 

Por su parte, el intendente mayor de la Policía Local, Juan Carlos Castro, apuntó que “fue muy llamativo y sorprendente para los agentes que se trasladaron hasta el lugar comprobar la rapidez y la habilidad con la que habían actuado estos jóvenes que, sin duda, demuestran un compromiso y una ciudadanía ejemplar, poco común en los tiempos que corren”. Asimismo, insistió en que tanto los Bomberos como los agentes de la Policía Local resaltaron que la labor de los menores fue decisiva para minimizar las llamas, hasta tanto no llegaba el servicio de Bomberos que fue, quien, en último lugar, extinguió por completo el incendio. 

Tras sentirse héroes por un día, ahora toca a los dos jóvenes volver a lo que les corresponde, los estudios. “Este curso vamos sobrados”, bromeaba Joaquín. Ambos parecen tener claro lo que quieren ser de mayores. Guardia Civil y Bombero. Y también lo que no quieren ser. Ni político ni periodista.