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Ateia critica la "burocracia extra" en el PCF que obliga a destruir mercancías

"Tenemos un centenar de contenedores que por la larga espera se han deteriorado", lamentan

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  • El PIF de Algeciras. -

El colectivo Ateia, que representa a 50 empresas y a un colectivo de 1.000 trabajadores en puestos directos y más de 4.000 puestos indirectos, ha manifestado su indignación y la preocupación existente en el sector "por la inoperancia y falta de apoyo de nuestro gobierno" en "solucionar urgentemente la grave crisis que estamos soportando" y que les lleva "a una situación desastrosa".

Ateia ha celebrado recientemente comité ejecutivo y asamblea de socios en la que ha tratado esta cuestión, que tiene que ver con "más de un centenar de contenedores que, por la larga espera en las instalaciones portuarias se han deteriorado y tienen que ser destruidas".

Al mismo tiempo, señalan que el colapso del Puesto de Control Fronterizo (PCF), antiguo PIF, "es terrible, por la carga de trabajo que supone esta burocracia extra que se ha creado".  

Para Ateia, "ahora que ya contábamos con personal suficiente para dar un servicio digno, los protocolos extrarodinarios que se han creado, hacen insuficiente el personal existente".
 
"Hemos podido hacernos eco por parte de nuestros asociados, de los continuos comunicados de sus clientes, que anuncian los desvíos de sus tráficos a otros puerto europeos y ya incluso nacionales, de manera inmediata.  Por el trato discriminatorio que están recibiendo sus mercancías en el puerto de Algeciras", añaden.
 
"Todos los clientes sin excepción ya sea exportadores o importadores, están en proceso de plantear recursos de alzada y reclamaciones dinerarias, para exigir a la administracion pertinente las cuantiosas perdidas que están sufriendo por esta manera de proceder, que difiere totalmente del resto de los puerto europeos que aunque se aplica la misma normativa, parece que tienen un trato diferente en su tramitación. Incluso tenemos constancia que algunos países latinos se están uniendo para plantearse una demanda al gobierno español por las grandes perdidas económicas que se les ha generado", insisten.
 
Desde Ateia, comentaron que "sólo nos queda intentar acudir a todos los organismos e instituciones que puedan darnos amparo , sobre todo en el ámbito europeo, para intentar comprender porque en Rotterdam, Amberes, Hamburgo , Lisboa y Sines, entran los mismos productos y acceden a los mercados libremente, sin ser bloqueados o rechazados como ocurre en Algeciras.       Ya que no llegamos a comprender este trato diferente , cuando la norma se debería de aplicar de igual modo en todos los puertos citados como aquí".

Añaden que "incluso tenemos constancia que empresas importadoras de Rotterdam, sobre todo, se han puesto en contacto con grandes compañías de transporte del levante español que realizan logística de perecederos con centro Europa, para ser utilizadas para introducir todos estos productos que se desvían desde Algeciras a su puerto, de nuevo a los mercados españoles por via terrestre. Para colmo, tenemos el anuncio de grandes importadores que ya ha dado instrucciones para desviarse a Tarragona, Cartagena y Vigo, porque al parecer tienen asegurada, una tramitación igual a la que reciben en Rotterdam.   Y esto, si que nos genera ya, una enorme preocupación por lo incomprensible que nos resulta. Vamos a intentar unir sinergias, para poder dar peso a nuestras justas reinvindicaciones , solicitando el apoyo de sindicatos, confederacion de empresarios, asociaciones portuarias que se ven afectadas de manera indirecta, y todas aquellas que de manera solidaria, nos quieran prestar su apoyo. Desde Ateia insistimos que no pretendemos que no se apliquen las normas sanitarias que establecen la comunidad en sus controles a la entrada de alimentos a la importación.    Pero no entendemos el diferente rasero que utilizan los diferentes países de la unión.     No sabemos si esto esta orquestado por los grandes lobbys de la alimentación que tienen sus sedes en los países bajos y que ven el crecimiento de nuestro puerto, en una firme amenaza o simplemente que seguimos en un país de quijotes que no sabemos hacer valer nuestros intereses", finalizan.

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