Según los últimos datos facilitados a este periódico por Aena, para ayer estaban previstos cuatro vuelos de esta operadora entre Barcelona y Sevilla (dos de salida y dos de llegada) con 100 pasajeros afectados en cada uno de ellos, que se suman a los 101 viajeros que se quedaron en tierra el sábado -cuando había previstos dos vuelos- y a los 100 del domingo -con otros dos vuelos cancelados-.
Desde Aena, que no descarta que el número de afectados aumente conforme pasen los días, ya que “Spanair no dejó de vender billetes hasta el mismo día en el que anunció su cese”, informaron que hasta ayer se habían puesto 83 reclamaciones en San Pablo por este motivo y que los mismos viajeros habían sido los encargados de recolocarse en vuelos de otras compañías.
“A pesar de todo, el funcionamiento de San Pablo ha sido muy normal debido a los pocos vuelos perjudicados en Sevilla por el cierre de Spanair -que aquí sólo enlazaba con Barcelona-”, señalaron fuentes de Aena, que explicaron que para ayudar a los pasajeros afectados han intensificado los mensajes de información por megafonía, además de facilitar un par de ordenadores para comprar billetes de avión con operadoras que no tienen oficinas en el aeródromo hispalense.
