Es el segundo bebé seleccionado genéticamente para curar a su hermano, desde que en 2006 entró en vigor la Ley de Reproducción
Estrella, la niña nacida el sábado en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, es el segundo bebé seleccionado genéticamente para curar a su hermano, desde que en 2006 entró en vigor la Ley de Reproducción Humana Asistida.
Por medio de un trasplante de células, Estrella podrá ayudar a su hermano Antonio, de 5 años, afectado de aplasia medular severa, una grave enfermedad hematológica que causa la desaparición de las células encargadas de la producción de la sangre en la médula ósea.
El primer bebé seleccionado genéticamente para curar a un hermano fue Javier, que nació el 12 de octubre de 2008 también en el Hospital Virgen del Rocío.
En dicho centro se llevó a cabo asimismo, en 2009, el trasplante de células del cordón umbilical de Javier a su hermano Andrés, de 7 años, que padecía una grave anemia congénita.
La autorización del diagnóstico preimplantacional con fines terapéuticos para terceros -que ha hecho posible los nacimientos de Javier y Estrella- fue una de las principales novedades que introdujo la Ley de Reproducción Asistida de 2006.
Consiste en analizar las células de los embriones de una pareja y, mediante fecundación in vitro, seleccionar uno sano para que se convierta en un potencial donante de su hermano y utilizar así su médula ósea o su cordón umbilical.
Hasta la aprobación de esta Ley, en España se permitía analizar y seleccionar embriones para prevenir una enfermedad del propio embrión en un futuro o para evitar que el hijo naciera con una enfermedad genética, pero no para servir de donante a otra persona.
Esta posibilidad sí la contempla la normativa actual, aunque la limita a casos excepcionales y que requieren una autorización expresa de la autoridad sanitaria.
Andalucía fue la primera comunidad en recoger el Diagnóstico Genético Preimplantatorio como un derecho incluido en la cartera de servicios de la Sanidad pública.
El primer caso de aplicación del diagnóstico preimplantacional con fines terapeúticos para terceros del que se tiene constancia en el mundo se produjo el año 2000 en Colorado, Estados Unidos, donde una pareja acudió a la selección embrionaria para tener un hijo libre de la anemia de Fanconi que padecía su otra hija.