Las fuentes, que prefirieron no ser identificadas, agregaron que los trabajadores de esta organización, entre los que se encuentran un ciudadano francés, un italiano y una canadiense, están en buen estado de salud.
Los cooperantes de Médicos sin Fronteras de Bélgica fueron asaltados el pasado día 11 en la región de Saraf al Omra, en Darfur Norte.
La liberación de los trabajadores, que se esperaba que llegaran anoche a Jartum, se llevó a cabo “sin condiciones”, según las fuentes. A su llegada a la capital sudanesa, las autoridades podrían ofrecer una rueda de prensa para explicar las negociaciones y la liberación de los secuestrados.
El Ministerio de Exteriores italiano anunció anteanoche que los cooperantes habían sido puestos en libertad. Sin embargo, esta información fue desmentida ayer por responsables políticos sudaneses, que precisaron que continuaban las negociaciones con los captores.
El secuestro, del que no se ha responsabilizado ningún grupo, se produjo una semana después de que el presidente sudanés Omar Hasan al Bachir decidiera expulsar a trece ONG que trabajaban en Darfur, en represalia por la decisión de la Corte Penal Internacional (CPI) de emitir una orden de arresto contra él.
La CPI acusa a Al Bachir de haber cometido crímenes de guerra y de lesa humanidad durante el conflicto de Darfur, que estalló en febrero de 2003 cuando dos grupos rebeldes se levantaron en armas en protesta por la situación de abandono de esta región occidental sudanesa.
Según cálculos de la ONU, alrededor de 300.000 personas perdieron la vida y más de dos millones y medio se vieron obligadas a abandonar sus hogares en un conflicto que enfrenta a grupos rebeldes de Darfur contra fuerzas gubernamentales y milicias fieles al régimen.