Nueve soldados turcos murieron ayer al ser alcanzado el vehículo en el que viajaban por una mina en una zona rural de la provincia suroriental de Diyarbakir, donde actúan grupos de rebeldes kurdos.
Nueve soldados turcos murieron ayer al ser alcanzado el vehículo en el que viajaban por una mina en una zona rural de la provincia suroriental de Diyarbakir, donde actúan grupos de rebeldes kurdos.
El jefe del Estado Mayor turco, el general Ilker Basbug, confirmó que la explosión se produjo al paso de un tanque y un blindado de transporte de tropas por una carretera de la provincia de Diyarbakir, en el sureste del país.
“Un convoy militar iba a pasar por la zona. Por ello, el tanque y el vehículo acorazado fueron enviados para asegurar la zona. El tanque pasó y la explosión se produjo al paso del vehículo blindado”, explicó Basbug.
El militar precisó que la explosión fue tan destructiva que se cree que fue empleado un “explosivo de fabricación casera de mucha potencia”, que fue activado por control remoto.
El ataque se produce dos días después de que la Policía abatiera en Estambul a un militante de una organización radical que coopera con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), el grupo armado que lucha por la independencia de los kurdos de Turquía.