El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha pedido hoy al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que "haga los deberes" que le corresponden durante el verano, para avanzar en el objetivo de pasar "de los gestos a los hechos".
"Quien tiene deberes es Sánchez, esperamos que a la vuelta haya aprovechado el tiempo", ha dicho Puigdemont, que ha añadido que "no se puede querer los votos para convertirse en presidente y luego no actuar en consecuencia".
Aunque el expresidente catalán rehusó "poner fecha en el calendario" a Sánchez, si mencionó "septiembre u octubre" como meses en los que a su juicio debería presentarse algún avance.
"Es razonable pensar que tras verano, al retomar el curso político, (Sánchez) ilumine un poco sobre cuál es la receta", dijo Puigdemont, que consideró que "no sería justo ni correcto" que el presidente del Ejecutivo español "dejara pasar" esa ocasión.
Por otra parte, subrayó que corresponde al PDeCAT y no a él mantener o no el apoyo al Ejecutivo central.
"Lo normal es que (Sánchez) se esfuerce un poco para seguir contando con este respaldo", dijo Puigdemont, que añadió que "es normal que digamos que tiene que poner los hechos sobre la mesa, no es condicionar, es de sentido común".
Por su parte, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, insistió en que el "tema central" de la legislatura catalana es y será "el derecho a la autodeterminación".
Según Torra, así se lo hizo saber a Sánchez durante su reunión de hace unos meses, en la que le advirtió de que tendrán "un otoño bastante complicado", teniendo en cuenta -dijo- que tanto los catalanes como los españoles están exigiendo que los gestos prometidos se concreten en hechos.
Admitió que el Gobierno catalán y el español parten de "posiciones opuestas", pero opinó que tienen que "converger" y recordó los reiterados llamamientos a la mediación para acercar esas posturas.
Durante su comparecencia, Puigdemont dijo, por otra parte, que su viaje "no acaba aquí" y que irá "hasta el último rincón de Europa" en defensa de la "justa causa del pueblo catalán" y hasta que sean puestos en libertad todos los independentistas en prisión.
"Hoy es un día importante en el terreno político pero también en el emocional", ha afirmado Puigdemont, que ha explicado que ha tardado "cuatro meses y cuatro días" en llegar a Bruselas, a donde viajaba cuando fue detenido en Alemania en cumplimiento de una euroorden que fue retirada el pasado jueves por el Tribunal Supremo.
Puigdemont ha comparecido junto al actual presidente de la Generalitat, Quim Torra, así como con el resto de exconsellers huidos y algunos nuevos miembros de la Generalitat, como Laura Borràs, Jordi Puigneró y Maria Àngels Chacón.