El emérito sí levantó el trofeo de ganador, que recibió de manos del presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda
El rey emérito Juan Carlos I ha abandonado este lunes Galicia, la víspera de que su hijo, el rey Felipe VI, visite la Escuela Naval de Marín (ENM) en Pontevedra para presidir la entrega de despachos a los nuevos oficiales de la Armada española.
El día antes de esos actos castrenses, a los que también tienen previsto asistir la princesa Leonor y la reina Letizia, el exjefe del Estado ha dado por concluida su decimotercera visita a España desde que se instaló en Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos) en agosto de 2020.
Antes del mediodía de este lunes, el emérito ha dejado la localidad turística de Sanxenxo (Pontevedra), donde se ha alojado desde el martes pasado, para desplazarse al aeropuerto de Vigo s en el vehículo que conducía su amigo Pedro Campos, el presidente del Real Club Náutico.
Tras más de dos horas de espera, su vuelo privado con destino Ginebra (Suiza), previsto inicialmente para las 13:10 horas, ha partido después de las tres de la tarde.
En su estancia en Sanxenxo, el rey Juan Carlos navegó el viernes y el sábado, no así el domingo, día en el que la embarcación contó con Ross McDonald y Jane Abascal como caña y táctico, respectivamente, ante la ausencia del padre de Felipe VI, que optó por seguir la exhibición de sus compañeros de equipo desde una neumática de apoyo junto a Campos.
El emérito sí levantó el trofeo de ganador, que recibió de manos del presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda.