Nacido en Minas de Riotinto en 1964, ocupa la Alcaldía de Huelva desde 2015 y tras ocho años mantiene las ganas intactas. Es consciente de que Huelva vive un momento histórico y quiere ser testigo en primera fila después de dos duros mandatos en los que se enfrentó a un Ayuntamiento “en bancarrota”. El apoyo a la industria, el desarrollo de una ciudad compacta y saludable y la consolidación de una oferta atractiva que atraiga al visitante tienen un papel destacado en su hoja de ruta para Huelva.
Se enfrenta a su tercer mandato. ¿Qué le queda por hacer y qué ha frenado la pandemia?
–Queda mucho por hacer porque un proyecto de ciudad no se consume en uno o dos mandatos. Es verdad que llegamos con un Ayuntamiento descompuesto completamente, desmoronado en lo económico, en la estructura de personal, en la prestación de servicios, en las empresas públicas, y con un modelo de ciudad por desarrollar. Por lo tanto, llevamos ocho años en primer lugar estabilizando y dando fortaleza y seguridad a las empresas públicas, al Ayuntamiento entrando en estabilidad presupuestaria, poniendo en marcha desde la planificación ese modelo de ciudad que pretendemos: Plan Estratégico, revisión del PGOU, Plan de Vivienda, Plan de Movilidad Sostenible Urbana de Huelva, Plan de Comercio y, en definitiva, esos instrumentos de planificación que nos permiten ir desarrollando de manera coherente la ciudad en los diferentes sectores y segmentos. Y la pandemia, sí es verdad que durante dos años paramos, nos dedicamos a cuidarnos, a cuidar a la población y cuidar también a los sectores económicos a través de ayudas, manteniendo la licitación de la obra pública, agilizando y anticipando pagos y dando oxígeno y liquidez a las empresas y al tejido productivo.
¿En qué ha cambiado Huelva en estos ocho años?
–Se han sentado bases, se ha dado estabilidad y ya en estos dos últimos años se está viendo la transformación de la propia ciudad, se aprecia el salto cualitativo en materia de cultura, tradiciones, de los elementos que forman parte de nuestra identidad, el protagonismo en la parcela deportiva, también en el posicionamiento de Huelva como capital del deporte. Son tantas y tantas cosas las que estamos desarrollando, pero todo tiene una base, la de la recuperación económica. Cuando llegamos, el Ayuntamiento estaba en bancarrota, solamente a los bancos le debía en torno a 255 millones de euros, más la deuda comercial, que nos íbamos a 400 millones de euros. Hoy hemos reducido la deuda con los bancos en torno a unos 150 millones de euros. Hemos pasado de un endeudamiento del 240% al 106% y vamos a terminar el año en el 93%. Hemos ganado muchísima credibilidad como buenos pagadores y hemos pasado de un periodo medio de pago de 400 a 28 días. Y ahora mismo lo que se está viendo de una manera exponencial es la progresión que tiene la ciudad en todos los ámbitos: económico, cultural, transformación física de la ciudad… Y lo que nos queda por vivir y por desarrollar.
La estabilidad económica es clave para aumentar la inversión.
–Ya estamos haciendo un esfuerzo importante de inversión. Hemos captado más de 50 millones de fondos europeos a través de los Next Generation y del programa Edusi. También vamos a tener más oportunidad de captación de inversión externa en el sector privado, fundamentalmente vinculado a la industria y a otros sectores dependientes y que tienen mucho que ver con los servicios (hostelería, comercio, turismo). Pero todo esto se tiene que soportar sobre un Ayuntamiento saneado. Nos encontramos un Ayuntamiento en ruina y unas empresas públicas en causa de disolución. Todo eso se ha invertido y la situación es ahora justamente la contraria. Esto nos va a permitir generar mucha más confianza y conseguir mayor inversión.
Le he escuchado varias veces que Huelva está en un momento histórico. ¿Por qué?
–Siempre he dicho que Huelva es una ciudad industrial, que tenemos que cuidar, mimar, potenciar e impulsar a nuestro sector industrial. Pero ahora, en la deriva en la que estamos a nivel planetario con la lucha contra el cambio climático y la descarbonización del planeta, Huelva va a ser potencia en la producción de hidrógeno verde, de metanol verde, de combustible verde y sostenible, y eso además tiene una repercusión directa en la industria, no solo en la que está, que va a acelerar el proceso de descarbonización, sino también ofreciendo posibilidades a la sombra de esta potencialidad en transición energética de venir otras empresas. Huelva vive un momento apasionante y ha dado un salto exponencial y vamos a seguir abundando en ese salto exponencial en todos los niveles.
¿A qué se refiere con ese salto exponencial?
–La transformación urbana de la ciudad, que está creciendo y se convierte cada vez en más amable y disfrutable, que ofrece oportunidades; una ciudad que se ha posicionado en el sector gastronómico, el Festival Flamenco nos coloca también como referente en ese panorama cultural y musical; nuestro Festival de Cine, el Ayuntamiento ha triplicado las aportaciones para que vuelva recuperar su esplendor; somos capital de múltiples acontecimientos deportivos… Estamos viviendo culturalmente una programación que satisface las más altas exigencias; en las tradiciones, el incremento exponencial que está experimentando la Semana Santa, la mejora también muy sustancial del Carnaval de Huelva. En Navidad nos hemos convertido en un referente y son caminos en los que tenemos que seguir avanzando, nada está hecho, pero por eso digo que vivimos un momento esplendoroso. Lo mires desde el punto de vista que lo mires, no tiene parangón. Es el momento de disfrutarlo y de que sirva de aliciente para seguir trabajando.
Pero siguen faltando las infraestructuras.
–Sin duda, las infraestructuras multiplicarían todas nuestras capacidades. Es simplemente contar con las mismas oportunidades que otros territorios y es un tema en el que el Gobierno de España tiene que entender y debe entender, tiene la obligación de hacerlo, que necesitamos esas infraestructuras claves. Y el Gobierno de Andalucía tiene que entender y debe hacerlo, que es estratégico para Andalucía que Huelva cuente con esas infraestructuras. Pero eso se hace con unión de verdad y peleando, y vamos a seguir reivindicando lo que nos corresponde. La llegada del AVE no porque ese proyecto requiere muchos años, pero el próximo mandato tiene que ser en el que pasemos ya de los estudios informativos, que nos tienen hastiados, o de las declaraciones de impacto ambiental, a redactar proyectos de ejecución de obra y empezar con los diferentes tramos. Eso tiene que ser, como que tiene que ser una realidad la intervención definitiva en las carreteras, en la A-435, o ese aeropuerto que es iniciativa privada y que estamos esperando que autoricen para que el sector privado apueste por el desarrollo económico de Huelva.
¿Hacia qué modelo de ciudad vamos?
–Hacia una ciudad compacta en la que en cada barrio de la ciudad se generen espacios de calidad, de convivencia, de ocio, de disfrute, pero que podamos interconectarnos, disfrutar de toda la ciudad, que tenga presencia toda la oferta cultural, en la que se incrementen las áreas de bajas o nulas emisiones y por lo tanto sea mucho más saludable. Necesitamos incrementar y potenciar muy mucho el transporte público, y hablo de autobuses y de taxis. Y en definitiva, esa ciudad que ofrezca también oportunidades para la implantación y puesta en marcha de proyectos empresariales. Tenemos una ciudad con muchísimas oportunidades y queremos un modelo de ciudad en la que se diga: “Es la ciudad donde quiero vivir y donde quiero estar”.
Hablemos de los distintos sectores. Ya ha recalcado que Huelva es industrial.
–Sin duda. Apoyo contundente, incondicional y hacia una industria en la línea en la que estamos avanzando. Estamos hablando de las expectativas que tenemos en transición energética hacia energías verdes, de proyectos como el de Atlantic Copper de economía circular, de resolver y empezar el proyecto Restore de restauración de las balsas de fosfoyesos y suprimir un proyecto que venimos arrastrando durante demasiados años. Huelva ofrece muchas oportunidades, también a la industria auxiliar.
¿Qué me dice de empleo y servicios sociales?
–Todo esto tiene proyección en el empleo y en las políticas sociales. La mejor política social es ofrecer oportunidades de empleo a las familias, a las personas, para dejar de ser clase pasiva y constituirse en clase activa. Nosotros actuamos desde el empleo a través de programas de formación, de desarrollo de talleres, de acogernos a programas que suponen intervención en la ciudad y generan empleo, licitando obra pública, colaborando con la Cámara de Comercio y la FOE, a través de un plan municipal de empleo. En definitiva, se trata de aunar esos esfuerzos pero también de generar esas condiciones para que vengan actividades y proyectos que a su vez contribuyan a la creación de empleo.
Hablemos de cultura, patrimonio y turismo.
–Estamos haciendo un esfuerzo importantísimo. Ya en cultura, no solamente a través de una programación de primerísimo nivel y a través de la potenciación del Festival Flamenco o del Festival de Cine, sino también a través del desarrollo de las actividades más tradicionales, como nuestras Fiestas Colombinas, la Feria del Caballo o Feria de Otoño, la Semana Santa o el Carnaval. En turismo, pues apostando por la difusión y promoción de Huelva a través de la cultura y de relación con el pueblo británico. La gastronomía es una palanca fundamental también a la hora de promocionar Huelva, Binómico está siendo un auténtico éxito. Estamos poniendo en valor nuestra playa, la playa urbana de Huelva. Este año hemos obtenido por primera vez la bandera azul en el Espigón.
El patrimonio arqueológico también puede ser también un filón.
–Efectivamente. El patrimonio es un elemento fundamental pero tenemos que desvestirlo de posicionamientos demagógicos y de verdad entender lo que somos, cuál es nuestra historia, de dónde venimos, la importancia que tiene esa historia de Huelva y cómo se refleja a través del patrimonio arquitectónico y arqueológico y ponerlo en valor, pero compatibilizándolo e integrándolo con el desarrollo de la propia ciudad. Y ahí tenemos un campo enorme de trabajo y de desarrollo.
¿Cuáles son sus planes para el Recreativo?
–La afición elegirá el Consejo de Administración que regirá los destinos del Recre y el Ayuntamiento será el garante de que no hay más desvíos, más incumplimientos que lleven al Recreativo a una tesitura, como ocurrió en los últimos años, de muerte. El Recreativo estaba muerto, ni siquiera estaba en la UCI. Entonces, la resurrección se hace una vez nada más y ahí tiene dos aspectos: culminar todo el proceso de salvación y, a la vez, que funcione como un club, como lo ha hecho históricamente, y que sean los socios, el recreativismo, los que decidan quién rige los destinos deportivos . Y el Ayuntamiento, que es la ciudad de Huelva, vigilante para que no vuelva a ponerse en riesgo la existencia del Recre.
¿Cómo está viviendo la campaña? ¿Qué sensaciones palpa en la calle?
–Yo en la calle siempre he percibido mucho cariño, mucho ánimo, mucha cercanía. La calle es Huelva, es mi vida y me siento muy a gusto entre mi gente y en mi ciudad. Tengo la ilusión y las ganas a tope. Me ilusiona pensar en la grandeza de todos los procesos democráticos.
Un último mensaje para los onubenses.
–Se da un proceso electoral en el que todos tenemos un presente y pasado en el Ayuntamiento y es una mochila que portamos y sabemos lo que da de sí cada uno, sabemos hasta dónde uno es capaz de comprometer todo, hasta donde es capaz de arriesgar por el bien y el interés de Huelva. Hasta donde es capaz de entregar su tiempo y su vida por Huelva. Lo que ofrezco es todo mi compromiso, todo mi esfuerzo, toda la inteligencia que pueda tener, todo el trabajo, todas las horas, estar con la gente y ofrecerme a seguir representando a mi tierra y a mi gente.
