Hace falta que nos lo creamos, como contrapunto a la tradicional espera de los manás y a la vieja creencia de que el buen paño se vende en el arca
La Diputación Provincial acaba de presentar una nueva edición del Premio de Cocina con Aceite de Oliva Virgen Extra, que es una decidida apuesta por seguir proyectando nuestro principal producto a las cocinas de todo el mundo, porque no hay otro camino mejor y más directo para que se sigan valorando las cualidades del jugo de aceituna, que tiene cada día más adeptos porque la verdad siempre acaba por abrirse camino a pesar de las campañas de desprestigio que sucios intereses promueven de vez en cuando. De todas las administraciones, la Diputación es la que de una manera permanente se viene mojando en el respaldo al sector, es la que en los últimos años más ha hecho para que empecemos a creérnoslo como contrapunto a la tradicional espera de los manás, el victimismo y el conservadurismo a ultranza en la vieja creencia de que el buen paño se vende en el arca; y ha aprovechando todos los escenarios posibles para colocar al aceite de oliva virgen extra en el lugar que le corresponde a través de iniciativas que van desde la organización de actos para enfatizar la cultura del olivo, hasta la selección anual de los mejores aceites o los concursos de gastronomía con el protagonismo del oro líquido jienense. Que la Corporación provincial haga esta apuesta en tiempos complicados es una manera de establecer jerarquías de política y entender que el aceite de oliva es una de las grandes prioridades para Jaén, pues el futuro hay que entenderlo siempre con nuestro principal producto. En esta sociedad del marketing lo que no está en el escaparate no existe, por eso estamos convencidos de que este tipo de actuaciones no serán baldías.