Los representantes del Consejo Vecinal de la Federación de Asociaciones Vecinales 'Objetivos Comunes' (OCO), estos son, los presidentes de las 23 asociaciones federadas, se concentraron ayer ante el Ayuntamiento para exigir el pago de parte de la deuda contraída. Exigieron alrededor de 35.000 euros, aunque a 23 de diciembre de 2013 el reconocimiento de deuda ascendía a más de 206.000 euros.
La presidenta de OCO, María Cantos, aseguró que “se les daría un respiro a las asociaciones vecinales”, a la vez que denunció la situación de “asfixia económica” a la que están sometidas.
Si antes del pleno del 26 de febrero no se ha ingresado a cuenta ninguna cantidad económica, los representantes del Consejo Vecinal acudirán a la sesión plenaria y dejarán las llaves de las 23 asociaciones y de la Federación, ante una “situación insostenible” que provocará el cierre definitivo de las sedes.
La presidenta de OCO recordó que están pidiendo el pago de gastos corrientes correspondientes al abono de facturas de luz, agua, seguros, teléfono y limpieza y que las asociaciones ya pagaron en 2010. “Durante estos seis años las asociaciones han estado incrementando sus gastos por mantener las sedes abiertas y fomentar la participación ciudadana. El Ayuntamiento no está cumpliendo, más cuando hace días se aprobó la subida salarial de tres ediles que ya no representan a los ciudadanos con una cantidad con la que se podría salvar la situación de las asociaciones vecinales”, lamentó Cantos.
La presidenta de OCO insistió en que las sedes vecinales son “el corazón de cada barrio” y que “se están cargando la participación ciudadana”.
Ayer visibilizaron el trabajo de las juntas directivas de las asociaciones vecinales, que se sienten “olvidadas y poco reconocidas”.
Lamentaron la tardanza y la falta de respuesta municipal a cuestiones urgentes para la ciudad. Lo ejemplificaron con la presentación de un mismo escrito los meses de diciembre, enero y febrero con el que solicitaban la participación en los presupuestos municipales, aportando un proyecto urgente por barrio para que se incluyera partida presupuestaria para estos. “Las asociaciones tienen un sentimiento generalizado de nunca tienen respuesta municipal y que cuando la hay, no se amolda a las demandas”, terminó la presidenta de OCO, María Cantos.