La directora de la Unidad de Igualdad de la Universidad de Jaén (UJA), Matilde Peinado, ha presentado al Consejo de Gobierno la evaluación de su I Plan de Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres (2011-2015).
En términos cuantitativos, el grado de cumplimiento del Plan puede valorarse como “positivo” porque las acciones realizadas (62,71%) o en proceso (22, 03%) constituyen un 84,75%, frente a las no realizadas (15,26% del total).
En términos cualitativos,se ha logrado un mayor equilibrio en la representatividad de mujeres y hombres en los tres sectores Personal Docente e Investigador (PDI), Personal de Administración y Servicios (PAS) y alumnado, con acciones en pro de corresponsabilidad y salud laboral con perspectiva de género o de formación en igualdad y perspectiva de género, pero se evidencian deficiencias en áreas como la Investigación.
Y es que los desequilibrios a favor del colectivo masculino son palmarios. Existen 131 grupos de investigación frente a los 109 que de 2011, de los cuales 29 están coordinados por mujeres, lo que representa un 22,14%.
Continúa siendo mayor la presencia del colectivo masculino en las cátedras y titularidades universitarias entre los miembros del PDI, una situación de desequilibrio agravada por las restricciones presupuestarias que tiende a perpetuarse en los próximos años y que sólo puede ser revertida adoptando medidas de acción positiva.
En el sector del PAS las desigualdades más significativas persisten en los puestos de dirección ocupados por funcionariado, donde hay una clara masculinización de las jefaturas.
En lo que respecta al alumnado, hay una presencia equilibrada de los dos sexos, pero el equilibrio se rompe cuando se consideran las ramas de conocimiento a la que pertenecen las enseñanzas, persistiendo ramas del conocimiento fuertemente masculinizadas como Ingeniería o Informática frente a Grados como Enfermería, Trabajo Social o Educación Infantil, donde los porcentajes de presencia femenina superan el 80%.
En cuanto a la actividad docente en la UJA, destaca el incremento del número de expertos y fundamentalmente de mujeres en estudios de género y teoría feminista.
En cuanto a gobierno, gestión y representación hay presencia equilibrada en el Equipo de Gobierno, pero en las facultades, centros y departamentos se encubre la masculinización de las direcciones de departamento frente a la feminización de las secretarías.