No todos los emprendedores en la industria alimentaria son jóvenes egresados de la universidad, hay casos como el de Julio Estalella, un jerezano que a sus 55 años y tras un ERE decidió tirarse a la piscina de las salsas picantes.

El hambre "intelectual", su capacidad como ingeniero y la necesidad de "dar de comer" a sus cuatro hijos fueron los motores que le propulsaron hasta la idea de crear salsas picantes con un producto muy autóctono de su tierra, el vinagre de Jerez.

Para Julio Estalella las casualidades no existen y, por ello, en una entrevista con Efe recuerda como si fuera ayer el estar hace ocho años viendo un documental en su casa de 'Así se hace' sobre salsa picante de tabasco.

En ese momento, no sabía qué le iba a deparar la vida; trabajó durante 24 años en Abengoa hasta que en junio de 2019 un ERE realizado por la empresa sevillana concluyó su andadura en el sector de la energía y la infraestructura.

Meses más tarde, al abrir la aplicación YouTube uno de los vídeos que salía en la página principal le volvió a recordar el documental que años atrás había visto, esta vez su situación de desempleo fue determinante para entender el vídeo como un presagio y actuar.

"Esto con vinagre de Jerez tiene que estar más bueno", se dijo en aquel momento Estalella y comenzó a "experimentar".

SALSAS QUE DESAFÍAN SU ESTEREOTIPO

El proceso de elaboración de estas salsas es como el tradicional pero añadiendo el toque autóctono: fermentan durante dos semanas los pimientos y, después, le agregan un toque de vinagre de Jerez.

Una de las intenciones de Julio Estalella era huir de las calaveras y los símbolos con los que tradicionalmente se vende este tipo de productos al estar relacionados con "lo picante".

Por ese motivo, se propuso darle a sus salsas jerezanas un toque más apacible para relacionarlas con el vino jerezano y la cultura de su tierra, así las llamó "Salsas Quietud".

Elaboradas de forma natural sin conservantes ni colorantes, ha creado seis salsas diferentes que, según detalla, no solo sirven como aderezo para platos de comida, sino que también se puede usar en cócteles.

Sobre el consumidor, el creador de las salsas reconoce que "cada vez es más exigente" ya que "viaja más lugares como Tailandia, México y otros en los que se toma mucha salsa picante".

Y esto hace que estén más acostumbrados a tomar productos picantes, pero, también que sean "más exigentes" y busquen nuevos sabores.

EMPRENDEDOR SENIOR

El comentario que más escuchó al comienzo de su camino en el mundo del emprendimiento fue: "tú estás loco", asegura el jerezano.

Tras 24 años de experiencia laboral en una misma empresa, el cambio al mundo del trabajo por cuenta propia sorprendió a su entorno y más cuando el protagonista de esta historia se encontraba en ese mismo momento pasando por un cáncer de colón.

Pero fue la necesidad galopante de tener que "dar de comer a cuatro hijos de entre 22 y 17 años" la que le hizo seguir su camino con determinación, un camino que sigue recorriendo con el ímpetu de los emprendedores.