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El 81% de los parados jóvenes de la comarca no tiene cualificación

El mayor porcentaje se sitúa en las localidades de Algeciras y La Línea, con un 85,4% que tiene poca cualificación

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La visita hace dos semanas al Campo de Gibraltar del subdelegado del Gobierno en Cádiz, Javier de Torre, puso de relieve una situación de la que se habla constantemente en el marco de las políticas de empleo, pero que sigue reiterándose con el paso del tiempo en la comarca y ante el que pocas actuaciones se han llevado a cabo: el déficit de formación.

Más concretamente, el subdelegado ahondó en una cuestión que ha suscitado bastante polémica en las últimas semanas, y que incluso ha sido rebatida desde otros frentes, como la Subdelegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en el Campo de Gibraltar.

Y este asunto no era otro que el déficit de formación en los propios desempleados, una situación que complica aún más la tesitura laboral de la provincia de Cádiz, con una de las tasas más elevadas de paro de España, y con una incidencia singular en el Campo de Gibraltar, una de las zonas también más castigadas por el desempleo.

Analizando con más detenimiento las cifras, y tras suscitarse una polémica en torno a dicha denuncia, el subdelegado pone de manifiesto que “como análisis del paro registrado en la provincia, se extrae la conclusión de que el perfil de los jóvenes parados en relación con su formación demuestra que las políticas formativas que son competencia de la comunidad autónoma, como son la formación en sus distintos grados y las políticas activas de empleo, no han funcionado”.

Javier de Torre pone como muestra irrebatible de este argumento el hecho de que “el 81,5% de los jóvenes menores de 35 años de la comarca del Campo de Gibraltar no tienen formación o esta es muy baja”, entendiendo por baja hasta Bachillerato y equivalentes, un nivel de formación a partir del cual la Subdelegación del Gobierno deja de emplear la denominación de “muy baja”.

Esta cifra pone de relieve la precaria situación con la que cuenta los jóvenes campogibraltareños en el ámbito formativo, dimensionando uno de los verdaderos problemas y retos a los que se enfrenta la comarca en los próximos años, y uno de los obstáculos más importantes que posee para esquivar los efectos de la actual coyuntura económica.

Así lo entiende el subdelegado, cuando señala que “es un hándicap importante. No podemos perder empleos por falta de formación. La cualificación y la especialización son aspectos fundamentales para esta zona, ya que existen empresas con un alto nivel y exigen este perfil”.

Especialización

Esta valoración de De Torre señala directamente a la necesidad de formación especializada que requieren, de manera creciente, tantos las empresas del polo industrial del Campo de Gibraltar como el puerto de Algeciras, los verdaderos pulmones económicos y laborales con los que cuenta la comarca.

En este sentido, Javier de Torre manifiesta que “hemos detectado en las entrevistas con empresarios la demanda de mano de obra que precisan, y la especialización de esta demanda no es atendida mayoritariamente por ciudadanos de la comarca, debiendo acudirse a contrataciones de trabajadores formados procedentes de otros lugares”.

De Torre considera, en contra de la opinión de sindicatos y de la Junta de Andalucía, que el trabajo que está desarrollando el Gobierno Central a través de la reforma laboral viene a representar una oportunidad para paliar esta deficiencia.

“La formación y el empleo es uno de los puntos más importantes que debemos cuidar. La reforma laboral promueve este aspecto con la obligación de 20 horas de formación por trabajador y año que deben ser aprovechadas para la formación continua del trabajador”, asegura el subdelegado.

Para Javier de Torre, “la reforma es un instrumento para evitar la destrucción de empleo porque prima adaptar las relaciones laborales al contexto actual antes que recurrir al despido. Es lo que persigue la reforma, que no haya que extinguir relaciones y sí adaptarlas a la situación actual. Busca acabar con las rescisiones a corto plazo y generar empleo a medio plazo”.

Comarca
Los datos que aportó Javier de Torre en su visita a la Cámara de Comercio del Campo de Gibraltar el pasado 13 de marzo hacían referencia al bajo nivel formativo de los desempleados de la provincia. Sin embargo, la situación en el Campo de Gibraltar es especialmente alarmante, ya que, si para Cádiz el subdelegado habló de una cifra del 72% sin cualificación o muy baja; si extrapolamos estos datos a la comarca se elevan al 81,5%”.

Observando los datos por municipios proporcionados por la Subdelegación del Gobierno, se alcanza una proporción de la dimensión del problema, ya que son las localidades de mayor población y recursos, como son Algeciras y La Línea, los que cuentan con un mayor déficit formativo en la población desempleada, ambos con un 85,4% de los parados de menos de 35 años sin cualificación o con cualificación muy baja.

En el caso de Algeciras, estamos hablando de 6.108 parados con menos de 35 años, de los que 5.221 no tienen cualificación suficiente, lo que les dibuja un horizonte complicado de integración en el mundo laboral dadas las propias trabas que ofrece su nivel formativo. En el caso de La Línea, con la cifra de 3.268 parados de menos de 35 años, son 2.797 los que no alcanzan la formación suficiente.

De cerca les sigue San Roque, donde el 84,5% de los parados de menos de 35 años no tienen cualificación, lo que se corresponde con una cifra de 1.426 sobre un total de1.686 personas. Los otros cuatro municipios, aunque con cifras algo menores, ofrecen un paralelismo con la situación en las anteriores localidades.

Así, Los Barrios posee un 80% de parados con menos de 35 años y sin cualificación (un total de 975 sobre 1.216); mientras que el porcentaje se eleva en Tarifa al 79,8% (841 sobre 1.053 parados);  al 78% en Jimena de la Frontera (392 sobre 502 parados); y al 76,2% en Castellar (125 sobre 164 parados).

Cámara de Comercio
El subdelegado del Gobierno en Cádiz, Javier de Torre, trasladó a la Cámara de Comercio, durante su visita del pasado 13 de marzo, la necesidad de articular políticas formativas dirigidas a los desempleados del Campo de Gibraltar.

La Cámara, no obstante, no es un órgano que asuma estas competencias, más propias de las administración y otras instituciones, si bien sí tiene implementadas algunas medidas dirigidas a mejorar la cualificación profesional, pero siempre desde la óptica de las demandas de las empresas, un aspecto muy interesante desde el punto de vista de la mejora de la empleabilidad.

En este sentido, la Cámara de Comercio mantiene un trabajo constante de búsqueda de las necesidades de las empresas campogibraltareñas, estableciendo algunas vías de formación en especialidades concretas, independientemente de la formación inicial que tenga esa persona y que, en ocasiones, puede necesitar una formación previa de base o no.

Una de estos mecanismos es el programa SIAP, consistente en la puesta en marcha de acciones experimentales cuya finalidad es alcanzar la inserción laboral de las personas desempleadas. Está dirigido a detectar las necesidades de personal en las empresas, elaborándose en atención a las mismas planes integrales que combinen orientación, formación y prácticas.

Otro de los programas articulados por la Cámara es el EPES, consistente en prácticas para desempleados en empresas para mejorar la cualificación de los futuros trabajadores. Generalmente, ofrece a los jóvenes recién titulados la posibilidad de adquirir experiencia profesional en empresas por un período comprendido entre los dos y los seis meses.

Otros recursos de la Cámara son acciones para impulsar el autoempleo (muchos de ellos desempleados que lo toman como alternativa laboral e independientemente de su formación), o la reforma de la Formación Profesional para el Empleo, donde un determinado cupo de las plazas de los cursos es para desempleados.

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