El Pleno de hermanos mayores cerró el pasado jueves el debate de la Carrera Oficial decantándose por recuperar el itinerario que se mantuvo hasta 2003, antes de que se optara por atravesar la plaza del Arenal y acceder a la Santa Iglesia Catedral por plaza Monti, Manuel María González, De la Rosa y plaza de la Encarnación.
De este modo, el palquillo se colocará en el entorno del monumento dedicado al Marqués de Domecq, lo que evitará que las cofradías que acceden a la Carrera Oficial por la plaza Aladro se vean obligadas a tomar por Eguiluz. Además, esta modificación permitirá que el resto de hermandades pueda rodear la Alameda de Cristina, prescindiendo en ese caso de calles como San Juan de Dios o Gaitán. En todo caso, las cofradías que bajan por Porvera podrían mantener estas vías de acceso toda vez que no alargarían sus itinerarios de manera significativa.
La Carrera Oficial mantendrá la estructura habitual hasta la plaza del Arenal. Una vez allí, las cofradías recuperarán el tránsito por Consistorio y Angostillo, para desembocar en la plaza de la Asunción. Este último enclave presentará una novedad significativa respecto a los años anteriores a la reforma del itinerario común. En lugar de pasar ante la fachada del Cabildo Viejo, los cortejos lo harán por delante de la portada principal de la iglesia de San Dionisio.
Este cambio permite ganar espacio de cara a la colocación de los palcos que deberán desplazarse desde la plaza del Arenal, toda vez que la fachada del Cabildo Viejo apenas daba opción a la reubicación de estas estructuras. De este modo, se colocará una tribuna ante el monumento erigido a la Virgen de la Asunción, quedando todavía espacio suficiente para levantar palcos a varias alturas en la superficie de la plaza que linda con la calle Padre Luis Bellido.
el ‘punto negro’ del itinerario
El último tramo de la Carrera Oficial vuelve a ser el más controvertido. Las cofradías bajarán por José Luis Díez para tomar a continuación por Santa Isabel y Visitación, accediendo desde ahí al primer templo diocesano. Se contempló la posibilidad de continuar hasta la plaza del Arroyo y subir por Cruces. Sin embargo, esta opción ha debido ser descartada para permitir que esta última calle se mantenga como vía de salida de la Catedral.
La Carrera Oficial mantendrá un número de palcos similar al de años anteriores y tiene vocación de permanencia en el tiempo, tal y como había expresado en reiteradas ocasiones el presidente del Consejo Local de la Unión de Hermandades, Pedro Pérez, que abogó desde el inicio de su mandato por consensuar un modelo que no fuera objeto permanente de revisión.
El nuevo trazado permitirá además que cofradías que habían debido variar sustancialmente los itinerarios de regreso a sus templos en estos últimos años puedan recuperar los recorridos acostumbrados antes de la reforma. El caso más llamativo es el de las hermandades que abandonaban la Catedral por la plaza de la Encarnación, subiendo De la Rosa y accediendo a Manuel María González y plaza Monti. Este regreso vuelve a ser ahora posible, incluido el paso de estas cofradías por la plaza del Arenal. En este último caso, sí conviene advertir de que todos los cortejos que opten por esta opción deberán transitar ante la fachada del edificio Los Arcos, ya que el aparcamiento subterráneo no permite hacerlo por la acera contraria, cual era la costumbre hasta hace unos años.
En esta tesitura se encontrarían hermandades como La Borriquita, La Coronación, La Cena, La Amargura, El Santo Crucifijo, Las Cinco Llagas, La Yedra, El Nazareno, Las Viñas, El Loreto o La Expiración, entre otras.
Corresponderá en todo caso a las respectivas cofradías optar entre mantener sus actuales itinerarios de regreso -en los casos en los que sea posible- o recuperar los recorridos históricos que debieron variarse como consecuencia de la reforma de la Carrera Oficial. Pero eso será, en todo caso, un debate que se producirá en los próximos meses.
