Una estancia laboral de su padre en Jerez le abrió el sentimiento xerecista
Diego Rodríguez es un chaval de 20 años que juega en el filial del Fortuna, equipo de la Bundesliga alemana, y que siente en jerezano y en xerecista. De hecho, aprovechando las vacaciones navideñas, ha estado en Jerez y estuvo presenciando en el palco presidencial el choque de los azulinos ante el Villarreal.
—¿Actualmente estás en el filial del Fortuna?
—Sí, en una Liga donde también hay filiales de otros equipos con el Shalke o el Lerverkusen. Estamos haciéndolo entiendo que bien y vamos a ver si logramos el ascenso de categoría. Allí hay una Primera, una Segunda, una Tercera y una Cuarta a nivel nacional y con un solo grupo en cada categoría. Nosotros estamos en la Cuarta.
—¿Ya has podido debutar con el primer equipo?
—Todavía no he tenido la oportunidad, pero tengo mucho contacto con la primera plantilla y estamos intentando dar el salto. No obstante, las categorías altas las conocemos ya que estuve también en el juvenil del Borrussia y ahí jugamos en la Primera División juvenil alemana. Estuve cuatro años jugando en la Primera División juvenil y ahora trabajamos duro para dar el salto a la primera línea del fútbol.
—¿Tú naciste en España?
—No, yo nací en Alemania, concretamente en Dormund, ya que mis padres vivían y viven allí. Tengo las dos nacionalidades, la alemana y la española.
—¿Y qué nacionalidad tienes como delantero?
—La del gol. Me considero un delantero de área. Soy un tipo grande, mido 1.89 y me gusta estar en el área. No sé..., por compararme con alguien, yo diría que, salvando las distancias, claro, soy un jugador que me asemejo a gente como Fernando Llorente o Álvaro Negredo.
—De esos necesita el Xerez a algunos. Y te hablo del Xerez porque sé que sigues muy de cerca al club. ¿Po qué?
—Pues eso viene de cuando mi padre vino a Jerez para hacer el proyecto de la tienda de Media Mark. Entabló amistad con un gran xerecista como es José María Piosa y nos fue metiendo el gusanillo y, desde entonces, sigo sus resultados, todas las noticias que se generan en torno a él y, la verdad, es que siento mucho amor por este equipo.
—¿Te gustaría jugar en el Xerez?
—Sería un sueño. Ya estuve cuando tenía 16 años jugando algún encuentro amistosos con los bes, y me sentí muy a gusto. Ojalá en algún momento se diese esa posibilidad. Me encantaría.
—¿Qué te pareció el partido ante el Villarreal que tuviste la oportunidad de presenciar?
—Muy bien. Me gustó. El equipo mereció más pero faltó fortuna. Al Villarreal lo tuvo contra las cuerdas y, la verdad, es que el equipo me gustó bastante aunque faltó definición. También nes cierto que el campo estaba en muy malas condiciones y eso también le pudo afectar. Lo más importante es que se vio ambición.
—¿Hablaste con Miguel Ángel, el director deportivo?
—Nos saludamos. Le di las gracias por haber atendido la petición de nuestro amigo José María para poder estar en el palco con mi padre. No tuvimos la oportunidad de hablar mucho. Ya lo conocíamos. Ahora estoy en el Fortuna y ya veremos.