El terrorista de ETA, Iñaki Cañas Cartón, condenado por la Audiencia Nacional a 258 años de cárcel, contrajo ayer matrimonio civil en la prisión de Botafuegos con una interna del centro de origen gallego.
Según fuentes judiciales, la decisión de celebrar el enlace en la cárcel fue planteada por los propios funcionarios “para evitar un despliegue de seguridad en el juzgado que implicaría a muchos agentes”, por lo que “es más fácil que una secretaria y un juez acudan a la prisión”.
En este sentido, cabe destacar que ninguno de los dos funcionarios tendrá contacto físico con el etarra ya que todo se hará a través de un cristal de seguridad, mientras que el resto de la ceremonia “será como cualquier boda civil”.
Cañas Cartón fue condenado en su momento por la Audiencia Nacional a 258 años de cárcel por el atentado cometido en 1990 contra viviendas de la Policía en Pasajes de San Pedro (Guipúzcoa) que produjo varios heridos y daños materiales.
Iñaki Cañas pertenecía al comando Ipar Haizea y es considerado el etarra más peligroso de los que se encuentran en Algeciras, prisión de máxima seguridad, en la que también permaneció, hace unos años, De Juana Chaos.
Huelga de hambre
Cabe recordar que, la estancia de este último etarra en el centro penitenciario algecireño fue más que sonada. Durante su estancia en la prisión de Botafuegos, y como consecuencia de unas declaraciones realizadas por De Juana Chaos, le fue ampliada la pena a dos años más, por lo que el etarra optó por iniciar una huelga de hambre que tuvo repercusiones a nivel nacional, dado que el estado del recluso se vio bastante deteriorado y provocó el posicionamiento a favor de la libertad de De Juana del entorno de ETA.
Por la situación que presentaba, tuvo que ser hospitalizado y obligado a ser medicado para paliar las consecuencias de la huelga.