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Cuatro días de protestas para recuperar la clase de infantil que cerró la Junta en Málaga

El colegio recibe más solicitudes que plazas, lo que ha dejado sin sitio en este centro a quince menores en el curso 2023-2024.

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  • Solo en la línea de cinco años quedan tres clases, “en cuatro y tres años estamos en dos unidades”.
  • Las ratios están al límite, con más de 25 alumnos por clase.
  • Además de las protestas, están promoviendo que “las familias entren en la página web de la delegación de Educación y firmen” para hacer presión.

Este martes no ha sido un día normal en el CEIP García Lorca de Málaga capital. A las 8.50 horas de la mañana, un grupo importante de familias y profesores han desplegado una pancarta en la que se podía leer “tres líneas para infantil, por el derecho a la elección de centro”. Así han iniciado movilizaciones, que repetirán cada mañana a la entrada del colegio, para recuperar las líneas educativas que se han cerrado. La Junta de Andalucía lleva “tres cursos consecutivos reduciendo” el número de clases en infantil, ha denunciado Sergio, uno de los profesores que ha participado en la protesta. Actualmente, ha explicado, solo en la línea de cinco años quedan tres clases, “en cuatro y tres años estamos en dos unidades”.

Mis niños están en tres y cinco años y hay 26 o 27 niños en cada clase, hay que repartir a los alumnos, porque es inmanejable para un profesor.

De cara al próximo curso, han informado desde el AMPA La Barraca, el colegio ha vuelto a recibir más solicitudes que plazas disponibles (hay 50 plazas, dos clases de 25 alumnos), lo que justifica la reapertura de la tercera clase “para garantizar el derecho a todas las familias de nuevo ingreso que quieran matricular a sus hijos en el García Lorca”. En el curso actual, se han quedado sin plaza once familias de infantil tres años y cuatro familias de infantil de cuatro años. “Creemos que hace falta”, al menos en la línea de tres años, porque “además hay muchísimos niños en cada clase”, ha manifestado Nieves, madre de dos alumnos: “Mis niños están en tres y cinco años y hay 26 o 27 niños en cada clase. Hay que repartir a los alumnos, porque es inmanejable para un profesor”.

Sergio, como docente, confirma que la “atención que podemos dar al alumnado es mucho menor, sobre todo en el caso de alumnos que necesitan una atención más individualizada, es totalmente imposible atenderles como necesitan”. Ve “fundamental” la bajada de las ratios para que “aumente la calidad de la educación”.


El hecho de “perder una línea”, ha añadido otra de las madres, María Dolores, “no solo supone perder plazas, sino también perder recursos en cuanto a personal de apoyo, más profesorado, más presupuesto”. Una situación que considera que “va en detrimento de la línea de infantil y de todas las etapas educativas del centro”. Tienen “especial” interés en que “estos recursos no se pierdan”, por lo que darán guerra a la Junta. Además de las concentraciones, están promoviendo “entre las familias que entren en la página web de la delegación de Educación y firmen una declaración, para solicitar que el centro recupere la línea”.

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