La
Guardia Civil ha desarrollado la denominada
operación 'Desplazado', en la que se ha desarticulado una
organización criminal especializada en
robos con violencia e intimidación a turistas extranjeros con un alto nivel adquisitivo de vacaciones en la provincia de Málaga, haciendo uso del método conocido como
'abracito'. Hay cinco detenidos.
Esta investigación, desarrollada en su lucha contra los delitos cometidos a turistas que pasan sus vacaciones en la provincia malagueña, se inició tras
varias denuncias por robos a varios extranjeros y con un nexo de unión entre ellas, las víctimas tenían un alto poder adquisitivo, han informado desde la Guardia Civil a través de un comunicado.
Según han señalado, las víctimas eran seleccionadas
en restaurantes exclusivos ubicados en localidades de la Costa del Sol, mientras
conducían vehículos de lujo o directamente en la vía pública. El objetivo principal de estos delincuentes era el
robo de relojes de lujo, joyas o carteras a estas personas extranjeras de vacaciones.
Una vez fijado previamente su objetivo,
una mujer perteneciente al grupo criminal se acercaba a la víctima y, mediante engaño, la abrazaba o agarraba mientras cometía el robo. Estas mujeres
no dudaban en emplear la violencia física si la víctima se percataba del intento de robo, siendo
apoyadas por un segundo autor, siempre varón, que esperaba en un vehículo cercano para emprender la huida.
Debido a su
itinerancia continua, este grupo criminal era
difícil de detectar, aunque como consecuencia de los numerosos dispositivos que la Guardia Civil llevó a cabo, los investigadores lograron localizar a varios miembros de este grupo criminal en
una vivienda ubicada en la localidad de Granada,
donde se ocultaban y desde donde se desplazaban por el litoral malagueño para cometer los delitos.
Finalmente, esta operación ha permitido la detención de cinco personas de nacionalidad rumana, y el
esclarecimiento de nueve robos cometidos en las localidades malagueñas de Mijas y Marbella, así como en Barcelona. Además, los agentes se han incautado de 2.300 euros en metálico.
Los detenidos han sido puestos a disposición judicial por la supuesta comisión de los delitos de
robo con violencia, hurto, pertenencia a organización criminal, lesiones, resistencia y desobediencia.
Además, a uno de los detenidos le constaba una requisitoria por la autoría de un
delito similar cometido en la provincia de Alicante. Esta operación ha sido llevada a cabo por agentes pertenecientes al Puesto Principal de Mijas (Málaga).