La marca automovilística sueca Volvo Cars ha lanzado en el mercado español la segunda generación de su modelo XC90, que se convierte en el primer vehículo de la firma en utilizar la nueva plataforma escalable y que incorpora dos novedades mundiales en términos de seguridad.
Este todoterreno reemplaza a la primera generación del XC90, que se puso a la venta en 2002 y que acumula unas ventas mundiales de 636.000 unidades. El modelo cuenta con un nuevo diseño exterior y establece un nuevo estándar en cuanto a la calidad de los materiales del interior y en términos de protección de los ocupantes y de los peatones.
Dentro del habitáculo se ha optado por unas líneas sencillas, con unos materiales de alta calidad y con únicamente ocho botones con los que controlar las diferentes funcionalidades. Entre las novedades destacan la gran pantalla táctil, así como el panel de instrumentos digital o el Head Up Display. También se ha mejorado la ergonomía de los asientos y la estética de elementos como la palanca de cambios o de la llave, que hace juego con la carrocería.
El nuevo XC90 se podrá adquirir inicialmente en el mercado español con dos motorizaciones, una de gasolina y otra diésel que se combinan con una caja de cambios automática de ocho velocidades. La primera de ellas, la de gasolina T6 tiene una potencia de 320 caballos y un consumo de 8 litros por cada cien kilómetros recorridos, mientras que el diésel (D5) cuenta con 225 caballos y consume 5,8 litros a los cien kilómetros recorridos.
La oferta mecánica del modelo se completará a finales de año con la incorporación de una nueva variante diésel de 190 caballos (D4) y con una de gasolina T5, de 254 caballos. Asimismo, también se pondrá a la venta la versión híbrida enchufable T8 Twin Engine, con una potencia combinada de 400 caballos, una autonomía en modo eléctrico de más de 40 kilómetros y un consumo combinado de 2,1 litros por cada cien kilómetros.
Este todoterreno puede contar con un amplio contenido de equipamiento, en el que destacan dos primicias mundiales, como el freno automático en intersecciones y la protección de los ocupantes ante salida de la calzada. Sin embargo, el coche puede tener más elementos de seguridad como el City Safety, la advertencia de colisión trasera, el piloto de asistencia o la visión de 360 grados.
El nuevo vehículo de Volvo se podrá adquirir en España con un precio de partida de 53.900 euros para la versión diésel de entrada a la gama en el acabado Kinetic y cinco asientos, mientras que la opción de mayor precio será la híbrida enchufable R-Design, que tendrá un coste de 83.459 euros.
