Transporta gas ruso directamente a Alemania por debajo del mar Báltico
La operadora del gasoducto Nord Stream dio hoy por concluidos "exitosamente" los trabajos de mantenimiento planificados en la infraestructura gasística, que transporta gas ruso directamente a Alemania por debajo del mar Báltico.
"Nord Stream AG ha finalizado exitosamente todos los trabajos de mantenimiento planificados en los dos hilos dentro del periodo establecido. La transmisión de gas se reanudó el 21 de julio", indicó la compañía con sede en Suiza en un breve comunicado.
La operadora del gasoducto recalcó que el cronograma de las actividades de mantenimiento "se coordinó estrechamente" con los socios de Nord Stream y la información sobre el mantenimiento fue "debidamente divulgada" de conformidad con el reglamento de la Unión Europea (UE) sobre Integridad y Transparencia del Mercado Mayorista de Energía (REMIT).
En su comunicado, Nord Stream AG no desvela la capacidad con la que ha comenzado a transmitir de nuevo gas a Europa, pero la lectura del flujo ofrecido por la compañía por horas en su página web entre las 03.00 GMT y las 04.00 GMT muestra 21.388.236 kWh, la siguiente franja horaria 29.289.682 kWh y entre las 05.00 GMT y las 06.00 GMT 29.299.802 kWh.
Las nominaciones en el gasoducto se sitúan para todas las franjas horarias de esta jornada en unos 29.292.183 kWh, salvo en las dos primeras, que fue de 29.284.591 kWh.
Según la operadora alemana, el flujo se sitúa por encima de las nominaciones y pueden alcanzar hoy la capacidad previa al mantenimiento, es decir un 40 % o unos 700 GWh.
Antes de iniciar el mantenimiento anual del gasoducto el pasado 11 de julio, el Nord Stream suministraba 67 millones de metros cúbicos de gas al día, correspondiente a ese 40 % de su capacidad.
Ello después de reducir en junio en dos tandas primero un 40 % y después un 33 % el flujo por problemas con equipos de bombeo reparados y fallas técnicas en motores.
Rusia indicó que por todo ello solo funcionan actualmente dos turbinas en la estación compresora de Portovaya, en la región de Leningrado.
Rusia advirtió el martes que pueden surgir incluso la próxima semana nuevos problemas si un motor que estaba en reparación en la planta de Siemens de Canadá no es devuelto a tiempo.
Entonces solo quedaría una turbina en funcionamiento, lo que obligaría a reducir a la mitad el flujo previo al mantenimiento, es decir a unos 30 millones o 33 millones de metros cúbicos diarios, según el presidente ruso, Vladímir Putin.