El presidente estadounidense, Joe Biden, tiene anunciará este martes nuevas acciones con las que espera endurecer el acceso a las armas de fuego en el país, y lo hará en una de las comunidades afectadas recientemente por un tiroteo masivo.
Biden visitará la ciudad de Monterey Park (California), donde un tiroteo acabó con la vida de 11 personas el pasado mes de enero, para extender sus condolencias a la comunidad.
Allí tiene previsto dar un discurso sobre el control de armas de fuego y explicará las medidas que quiere impulsar.
Entre ellas está la de encargar al fiscal general de Estados Unidfos, Merrick Garland, que ajuste la definición legal actual de las empresas que venden armas para que se ciñan en mayor medida a la ley que les obliga a verificar los antecedentes penales de todo potencial comprador.
"Esta medida significa que se venderán menos armas sin una revisión de antecedentes penales y por lo tanto, habrá menos que acaben en manos de criminales y abusadores", dijo una funcionaria de la Casa Blanca que adelantó las acciones en una llamada con medios.
A su vez, anunciará que el Gobierno va a poner en marcha campañas de información sobre las denominadas leyes de "alerta de peligro (Red Flag)", que permiten activar un procedimiento legal para confiscar las armas de fuego de quienes representen un peligro para terceros o para sí mismos.
"19 estados y el Distrito de Colombia han aprobado leyes de este tipo (...) pero no son efectivas si el público no sabe cuándo y cómo usarlas", agregó la funcionaria.
Con respecto a los fabricantes, Biden pedirá a la Comisión Federal de Comercio elaborar un informe sobre cómo estas empresas promueven el uso de armas de fuego entre los menores de edad, señaló la Casa Blanca.
En junio se cumplirá un año desde que el Congreso aprobara un limitado pero histórico acuerdo legislativo para el control de las armas de fuego.
El proyecto de ley incluyó una revisión del proceso de compra para los menores de 21 años e incluyó incentivos para los estados que aprobasen las llamadas leyes de "alerta de peligro".
Sin embargo, este tipo de restricciones se ha encontrado con la oposición de algunos miembros del partido republicano, quienes han argumentado que viola los derechos constitucionales.
El pasado 21 de enero, un hombre mató a once personas en la ciudad de Monterey Park, a 15 kilómetros de Los Ángeles, y se suicido poco después cuando fue acorralado por la policía.