Zobaran Arriola, Mikel Oroz Torrea (responsable de la elaboración y suministro de explosivos), Urko Labaka e Ibán Sáez de Jáuregi fueron enviados a la cárcel tras haber sido imputados por los mismos cinco cargos.
El de pertenencia a una organización terrorista, que puede ser penado con hasta diez años de cárcel y los otros tres son falsificación de documentos, falsificación de escrituras privadas, uso de matrículas falsas y tenencia de armas en banda organizada.
La Fiscalía de París abrió una investigación judicial y señaló que “hay verificaciones en marcha” sobre los encarcelados.
El pasado viernes, el ministro francés del Interior, Claude Guéant, había vinculado a uno de ellos con el asesinato de un policía francés en marzo del pasado año.