Corea del Sur ha abogado este miércoles por crear "un nuevo orden" en la península coreana, basado en la construcción de la confianza, en el marco del último acercamiento con el Norte para resolver cuestiones pendientes desde hace años.
"Las dos Coreas albergan un alto nivel de desconfianza. De alguna manera podemos decir que no hay confianza, pero paradójicamente creo que es el momento adecuado para tomar la iniciativa y establecer un nuevo orden basado en la confianza", ha dicho el ministro de Unificación de Corea del Sur, Ryoo Kihl Jae, en una rueda de prensa.
Ryoo ha subrayado que debe tratarse "de un acercamiento de dos pistas hacia el diálogo como un medio de presión para conseguir que las dos Coreas sean capaces de construir y ganar confianza", según ha informado la agencia de noticias Yonhap.
Desde junio, Seúl y Pyongyang están inmersos en un proceso de diálogo para resolver cuestiones pendientes y frenar la escalada de tensión de los dos últimos años, en los que el régimen comunista ha realizado su tercera prueba nuclear, ha lanzado varios misiles y ha amenazado con atacar a Estados Unidos.
Tras seis rondas de conversaciones en julio, finalmente el 14 de agosto ambos países llegaron a un acuerdo para normalizar la situación en el complejo industrial de Kaesong, que el Norte cerró unilateralmente el pasado mes de abril, en medio de la escalada de tensión bilateral.
A este acuerdo, siguió otro, a propuesta de la presidenta surcoreana, Park Geun Gye, para "reducir el sufrimiento de las familias separadas" permitiendo que puedan reunirse en la festividad del Chuseok, que este año se celebra el 19 de septiembre.
Además, ayer el Sur propuso al Norte reunirse el hacia el 19 de septiembre para abordar la reanudación de las visitas turísticas al monte Kumgang, después de acordar la reagrupación de las familias separadas por la guerra coreana.