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Al menos 6 heridos y 54 detenidos en las protestas contra un baile derechista

Además, se registraron 150 denuncias, según la fuente, que añade que se movilizaron unos cinco millares de personas en las diversas manifestaciones de anoche

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  • PROTESTAS -

Al menos seis policías resultaron heridos y otras 54 personas fueron detenidas durante las protestas contra la celebración de un baile de un partido ultranacionalista en Viena, informó hoy la Policía de la capital austríaca en un comunicado.

Además, se registraron 150 denuncias, según la fuente, que añade que se movilizaron unos cinco millares de personas en las diversas manifestaciones de anoche.

En previsión de las mismas, que habían sido convocadas por diversos grupos de izquierda, un total de 2.500 agentes de seguridad se desplegaron para garantizar el acceso al controvertido Baile de los Académicos, organizado en el Palacio Imperial (Hofburg) por el ultranacionalista Partido Liberal de Austria (FPÖ).


Los policías heridos sufrieron moretones, cortaduras y traumatismos en los oídos, precisó el portavoz de la Policía, Roman Hahslinger, a la agencia austríaca APA, y añadió que no tenía datos sobre otros posibles lesionados.

En la manifestación principal contra el baile, en la que participaron unas 9.000 personas según la organización y 2.000 según la Policía, no se produjeron incidentes.

Sin embargo, en otras partes de la ciudad los manifestantes bloquearon calles, lanzaron petardos y causaron diversos daños materiales, explica el comunicado.

Los agentes de seguridad intervinieron también cuando grupos de manifestantes impedían el paso de taxis hacia el Hofburg, antiguo palacio imperial de la Corte de los Habsburgo.

La policía confiscó armas prohibidas, artefactos pirotécnicos, cuchillos y drogas.

El llamado "Akademiker Ball" es la continuación, con un nombre distinto, de un baile organizado desde la década de 1950 por cofradías de estudiantes de ultraderecha.

Varios dirigentes de extrema derecha europeos, entre ellos la líder del Frente Nacional francés, Marine Le Pen, acudieron en 2012 a esta cita, celebrada aquel año en el aniversario de la liberación del campo de exterminio nazi de Auschwitz (el 27 de enero), algo que fue criticado por políticos de izquierda como una afrenta a las víctimas del Holocausto.

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