El hombre que hizo colisionar su vehículo contra un furgón policial en la parisina avenida de los Campos Elíseos llevaba al menos un arma encima y tuvo que ser sacado del coche en llamas por los gendarmes después de que éste explotase, según el portavoz del Ministerio del Interior, Pierre-Henri Brandet.
El hombre ha muerto "muy probablemente", dijo a la prensa Brandet, que añadió que no ha habido heridos entre las fuerzas de seguridad ni entre los civiles.
La Fiscalía Antiterrorista ha abierto una investigación por este ataque, señaló Brandet, que insistió en que las operaciones de los artificieros continúan para asegurarse de que no existen más riesgos.
La Prefectura de Policía anunció en su cuenta de Twitter que "la situación ya está controlada" y confirmó que "no hay heridos en las fuerzas del orden ni el público".
Según el canal informativo "BFM TV", el agresor, que conducía un Renault Mégane de color gris metalizado, es un hombre de 33 años y fichado por los servicios de inteligencia como sospechoso de radicalización.
De acuerdo con esta misma fuente, dentro de su vehículo llevaba un kalashnikov, cartuchos, armas de mano y una bombona de gas.
Un obrero que trabajaba al lado del lugar de los hechos relató a Efe cómo vio a un hombre tendido en el suelo junto al coche, tras el supuesto ataque, que "parecía inconsciente".
La zona del incidente, que ha sido acordonada por la policía, es en el comienzo de la avenida, muy cerca del Palacio del Elíseo, sede de la Presidencia francesa, que se prepara para recibir dentro de unas horas al rey Abdalá de Jordania.
Decenas de vehículos de policía, de bomberos y ambulancias se han desplazado al lugar de los hechos.
Hace casi dos meses, el 20 de abril, los Campos Elíseos fueron escenario del asesinato por disparos de un policía a manos de un hombre que había jurado lealtad al grupo yihadista Estado Islámico.