El Reino Unido necesitará un periodo de transición "limitado" entre su salida de la Unión Europea (UE) y la introducción de un nuevo acuerdo comercial bilateral para adaptar su economía a los efectos del "brexit".
Ese es el mensaje que lanzaron hoy los ministros británicos de Economía y de Comercio Internacional, Philip Hammond y Liam Fox, respectivamente, en un artículo escrito conjuntamente para el "Sunday Telegraph", en el que reiteraron que este divorcio es irreversible.
Ambos explicaron que ese periodo de transición, así como cualquier nuevo acuerdo comercial entre las partes, no serán "indefinidos" y tampoco funcionarán como una "puerta trasera" para permitir la permanencia del Reino Unido en el bloque comunitario.
Hammond y Fox insistieron en que Londres abandonará el mercado único y la unión aduanera una vez concluyan las negociaciones con Bruselas sobre los términos de su separación y arranque el "brexit", lo que está previsto que ocurra el 29 de marzo de 2019.
A partir de entonces, dijeron, se debería instaurar una fase de transición de "tiempo limitado" encaminada a "reforzar nuestros intereses nacionales" y a "generar confianza en la economía".
"Los dos estamos de acuerdo en que durante ese periodo el Reino Unido estará fuera del mercado único y de la unión aduanera y será un país independiente de la UE, al margen de los tratados comunitarios", expresaron los ministros.
En los meses posteriores al "brexit", prosiguieron, las fronteras británicas "seguirán funcionando con normalidad", los productos comprados en internet "todavía deberán atravesar barreras" y los negocios continuarán suministrando a sus clientes en la UE".
El artículo de Hammond y Fox se interpreta como una muestra de unidad del Gobierno británico, después de que ambos ministros han mantenido posiciones enfrentadas sobre sus preferencias por un "brexit" suave o duro, respectivamente.
Dentro de esta estrategia, el Ejecutivo que dirige la primera ministra conservadora Theresa May presentará esta semana una serie de documentos en los que tiene previsto detallar sus objetivos de cara al comienzo a final de este mes de una nueva ronda de conversaciones con sus socios comunitarios.
Entre otras cuestiones, Londres quiere abordar con propuestas concretas la situación de la frontera de Irlanda del Norte con la República de Irlanda, clave para el futuro de la economía de la isla y su proceso de paz.
Hammond afirmó el pasado mes que el citado periodo de transición debería concluir como máximo en 2022, cuando se prevén elecciones generales en este país.
Durante una primera fase, el titular de Finanzas, en línea con lo que pide el sector empresarial británico, querría mantener el acceso al mercado único y la unión aduanera, según informó entonces el periódico "Financial Times".
No obstante, esa opción parece ahora descartada, después de que Hammond y Fox presentasen hoy un frente común al respecto.