Corea del Norte criticó y amenazó a Australia por sus "peligrosos" movimientos para alinearse con Corea del Sur, y especialmente con Estados Unidos y su actitud beligerante hacia el régimen de Pyongyang, según informaron medios estatales.
"Últimamente Australia muestra movimientos peligrosos al unirse con celo a las frenéticas provocaciones políticas y militares de los Estados Unidos contra la República Popular Democrática de Corea (nombre oficial del país)", explica un comunicado publicado hoy por la agencia de noticias estatal KCNA.
"La ministra australiana de Asuntos Exteriores expresó personalmente su apoyo a la postura de EE.UU. de tener en mente todas las opciones, incluida el uso de la fuerza contra la RPDC, y visitó Panmunjom junto a la ministra de Defensa para criticar a la RPDC durante su visita a Corea del Sur", añade.
El texto hace referencia a la visita que las titulares australianas de Exteriores y Defensa, Julie Bishop y Marise Payne respectivamente, realizaron a Corea del Sur esta semana y en el marco de la cual se reunieron con sus homólogos surcoreanos y visitaron la aldea de la tregua de Panmunjom.
Panmungjom se encuentra en el corazón de la tensa zona desmilitarizada (DMZ) que separa a las dos Coreas, que técnicamente permanecen en guerra desde hace casi 70 años.
Durante la visita, enfatizaron la necesidad de ejercer la "máxima presión diplomática" ante las ambiciones nucleares de Corea del Norte, país al que instaron a abstenerse de realizar nuevas pruebas de armas y a abandonar su programa nuclear y de misiles.
"Si Australia continua en la senda de EE.UU. a la hora de imponer presión militar, económica y diplomática sobre la RPDC pese a nuestras repetidas advertencias, no podrán evitar un desastre", sentencia la nota norcoreana.
La visita de las ministras de Australia, uno de los principales aliados estratégicos de EE.UU. en Asia Pacífico, para mantener las llamadas reuniones 2+2 con sus homólogos surcoreanos ha llegado en un momento de máxima tensión ante la escalada dialéctica entre el régimen norcoreano y el presidente estadounidense, Donald Trump.