En medio de una expectación insólita en la flamante Ciudad de la Justicia, con una treintena de medios y un número de periodistas y cámaras que rondaba el centenar, los que fueran presidente y director administrativo del Palau declararon ayer durante algo más de una hora cada uno ante el titular del juzgado de instrucción número 30 de Barcelona.
En la vistilla posterior a la declaración, la Fiscalía ha pedido prisión sin fianza para los imputados, a lo que se han adherido las acusaciones ejercidas por la Fundació Orfeó Català y por el Consorcio del Palau de la Música, alegando el riesgo de fuga y de destrucción de pruebas.
El ministerio público argumentó, además, que el riesgo de fuga es elevado por los “elevados recursos” de que disponen los querellados, algunos de ellos en el extranjero.