La epidemia de la COVID-19 ha causado en Francia hasta el momento al menos 13.832 muertes, de las que 8.943 se han registrado en hospitales, con un aumento de 353 en las últimas 24 horas, según informaron este sábado las autoridades sanitarias francesas.
El director general de Sanidad, Jérôme Salomon, también reveló en su rueda de prensa diaria que otras 4.889 personas han fallecido hasta el momento en residencias de ancianos y centros de dependencia, lo que suponen 290 más muertes de las que se informaron ayer viernes.
Por tercer día consecutivo, el número de personas atendidas en cuidados intensivos bajó con respecto a la jornada anterior, con una caída de 121 casos, para situar la cifra de pacientes en esas unidades en 6.883.
Según Salomon, en los últimos días se está perfilando una "meseta epidémica", que obliga a mantener el confinamiento y las medidas de distanciamiento social, aunque destacó que la ligera bajada de la presión en las ucis supondrá un alivio para los equipos médicos.
Hasta este sábado, Francia ha contabilizado un total de 93.790 casos positivos por la COVID-19, 3.114 más que el viernes.
El confinamiento empezó en Francia el pasado 17 de marzo y, tras una primera prolongación hasta este 15 de abril, está previsto que el presidente, Emmanuel Macron, detalle una nueva ampliación en un discurso que ofrecerá el lunes a la nación.