El Ministerio de Salud de China ha informado este miércoles de la aparición de tres nuevos casos de la COVID-19, todos ellos en Pekín, que ya acumula 331 desde el pasado 11 de junio, cuando se registró la nueva ola de contagios en uno de los principales mercados mayoristas de la capital, sin embargo, se trata de la cifra más baja desde entonces.
Durante el martes no se ha producido ningún deceso por la COVID-19, por lo que el número de fallecidos se mantiene un día más en 4.634, mientras que el número de casos confirmados en el país ha ascendido hasta los 83.534. Un total de 78.479 pacientes han logrado superar la enfermedad, tras los últimos diez que han sido dados de alta.
A su vez, 421 pacientes continúan recibiendo asistencia médica, siete de ellos en estado grave. Sin nuevos casos procedentes del extranjero, las cifras de los contagios importados se mantienen en 1.918, de los cuales 1.839 han logrado abandonar el hospital tras recuperase, aunque todavía permanecen hospitalizadas otras 79 personas.
Las autoridades chinas han contado que 6.479 personas que tuvieron contacto cercano con algún enfermo de la COVID-19 siguen bajo observación médica, mientras que 703 salieron del hospital este martes.
Hasta el momento, y tras el severo repunte de la semana pasada, las cifras de Hong Kong se han estabilizado en los últimos días, ofreciendo así un balance momentáneo de 1.205 casos de coronavirus, siete fallecidos, y 1.107 personas recuperadas.
En cuanto a la otra región administrativa especial dentro del territorio chino, Macao, quien no había modificado sus cifras hasta la semana pasada desde el inicio de la pandemia, continúa con 46 casos acumulados, de los cuales 45 han logrado superar la enfermedad.