La Policía Nacional de Granada ha detenido a un varón de 33 años, con antecedentes, acusado de quebrantar una orden de alejamiento en vigor respecto a su expareja y de agredirla tanto a ella como a un policía.
Con el objetivo de acceder a la vivienda donde se encontraba la víctima, el detenido violentó la puerta a patadas y una vez en el interior agredió y amenazó a su expareja, arrancando además el cuadro eléctrico y dejando el domicilio en plena oscuridad, según informa en un comunicado el Cuerpo Nacional de Policía.
Los policías que acudieron en la madrugada del pasado domingo al distrito alertados por la Sala del 091 se percataron al llegar de que la puerta de la vivienda estaba violentada y el interior en la más completa oscuridad. La víctima se encontraba muy nerviosa y tras entrar localizaron a un varón escondido en una de las habitaciones.
Los policías intentaron detenerlo en el lugar donde estaba escondido, aunque consiguió salir del dormitorio y acceder a la cocina, momento en el que fue reducido y detenido cuando introducía la mano en un cajón con la intención supuestamente de coger uno de los múltiples cuchillos que había en el mismo.
Debido a la fuerte resistencia y agresividad que presentó, causó lesiones a un policía que necesitó recibir asistencia y sufrió desperfectos en la ropa.
Los agentes recabaron en el lugar diferentes datos, pudiendo comprobar que le constaba en vigor una orden de alejamiento y no comunicación con la víctima.
El detenido fue trasladado a dependencias policiales y puesto posteriormente a disposición judicial.
