La
alcaldesa de Ronda, María de la Paz Fernández, ha anunciado este jueves que en un mes darán comienzo las obras de la
segunda fase del Camino del Desfiladero, el proyecto conocido como el paso de la Garganta del Tajo, que se encargará a la
empresa Sando por valor de 1.087.426 euros. La mercantil ya ha firmado el contrato con el Ayuntamiento para el desarrollo de esta fase de los trabajos.
La regidora local ha resaltado que “es una satisfacción anunciar este avance en la adjudicación de la obra, que se suma a la primera fase, lo que permitirá completar este paseo por nuestro principal atractivo turístico. Estamos hablando que ya es el monumento más visitado de Ronda y estamos muy orgullosos de poner en marcha pronto los trabajos para desarrollar el tramo más impactante de este proyecto”. Así, ha indicado que, sin contar a la población rondeña, han sido más de 40.000 personas las que ya han recorrido el Camino del Desfiladero “aunque queda por ejecutar el tramo que dará la oportunidad de conocer nuestro principal monumento natural desde una perspectiva nunca antes vista”.
Como ha recordado, la adjudicación recoge que son
seis meses el plazo de ejecución de estos trabajos, “que necesitan de una maquinaria especial para poder instalar las pasarelas de madera, unos elementos que, en caso de que tuvieran que ser retirados, no generarán ningún impacto al entorno en el que se van a colocar”.
Características técnicas
Con respecto a las características de esta actuación, se trata de una obra que arrancará en la base del Puente Nuevo y transcurrirá hacia Padre Jesús, desembocando en la zona de los baños árabes, junto a la ermita de San Miguel, en un recorrido de 500 metros de longitud, a los que habría que sumar los 200 que ya están abiertos al público.
“Es una actuación que cuenta con un importantísimo impulso por parte de la
Diputación Provincial de Málaga, que subvenciona el 50% de la ejecución porque han reconocido la importancia de un proyecto que está llamado a ser un revulsivo turístico para toda la provincia y para Andalucía”, ha valorado la munícipe, quien también ha apuntado que la instalación se ejecutará con elementos desmontables, es decir, con pasarelas de madera de una anchura de 1,2 metros que se instalarán a una altura de tres metros del fondo del cauce del río, para salvar su crecimiento en caso de lluvias torrenciales. Este proyecto ha sido elaborado por Luis Machuca y Asociados.