Y la madre se reunió con sus hijos. Atravesó el dintel de la puerta de la parroquia de Nuestra Señora de la O y los rayos del atardecer tiñeron su faz de una luz anaranjada. En una nube de incienso y conducida por tan sólo el sonido del murmullo de sus fieles, Nuestra Señora de Rosario miró frente a frente a su pueblo, que ansiaba con júbilo tal encuentro tras dos años de larga espera.
La procesión, encabezada por miembros de la Hermandad de Nuestra Señora del Rosario, seguidos por la Corte de Honor a la Virgen, abrieron paso al camino que seguiría la patrona durante su recorrido procesional por las calles de la localidad.
Tras tres golpes de llamador, la primera chicotá de este trayecto dio pie, como no podía ser de otra forma, a la primera marcha procesiónal interpretada por la Banda Maestro Enrique Galán para acompañar sus andanzas a la Virgen de la mano de su capataz, el hermano Pablo Barba.
La procesión seguirá el siguiente itinerario: Plaza Bartolomé Pérez, Méndez Nuñez, Gravina, Glorieta José María Pemán, Avda San Juan del Puerto Rico, Veracruz, Plaza Andalucía, Rosario, Isaac Peral, Castelar dcha, Plaza de San Roque, García Sánchez, Charco, Plaza Andalucía, Blas Infante, Sor Celina, San Clemente, Gómez Ulla, ODonnel, Constitución, Cuna, Plaza Padre Eugenio, Plaza Bartolomé Pérez, hasta la llegada a su templo.
En su recogida tras una gran petalada por las calles del centro, Nuestra Señora del Rosario fue recibida en la plaza Bartolomé Perez por sus fieles a los que sorprendieton unos fuegos artificiales que dio el toque de color a una noche tan especial. Un espectáculo que puso el broche de oro despidiendo a la Patrona, esta vez sí, hasta el año que viene.
