Desde este lunes, el Ayuntamiento ha comenzado a retirar las máquinas y señalización de la Zona Azul que ha estado funcionando durante los meses de julio y agosto, como una medida que favorece la rotación de los vehículos en apoyo al comercio local, y que ha permitido más facilidades a la hora de aparcar en el centro y zonas más turísticas de la localidad.
Concluido los meses fuertes del verano, en los que la afluencia de visitantes hace más complicado encontrar aparcamiento en el centro, zonas cercanas a la playa, así como en determinados puntos de Costa Ballena, la Zona Azul y Naranja ha pasado a ser desde el pasado 1 de septiembre, de libre estacionamiento, tal y como han indicado desde la empresa municipal AREMSA.
Desde el Ayuntamiento se insiste en que estas zonas cumplen un importante servicio, ya que resultan muy útiles para dar una mayor movilidad a las plazas de aparcamiento que existen, y para permitir a más personas la posibilidad de estacionar su coche en estacionamientos de ciertos puntos de la localidad, que de otra forma podrían verse ocupados por vehículos que en algunos casos quedan aparcados durante días o semanas en zonas turísticas, o en las que se congregan una gran cantidad de establecimientos y comercios.