El
alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha anunciado que ha solicitado una reunión con la
dirección de Adif, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias”, porque “no piensa consentir el
deterioro progresivo” que está sufriendo la
alta velocidad en Sevilla y que ha sido denunciada, no sólo por los usuarios, sino por los empresarios del desayuno informativo de la
Asociación Española de Directivos (AED) en el que estaba participando.
Según Sanz, en la reunión no sólo abordará las
incidencias reiteradas que están sufriendo las conexiones ferroviarias de alta velocidad con Madrid y el resto de capitales con las que se conecta Sevilla, un deterioro que ha considerado
“diario y progresivo” más allá de los problemas derivados de la borrasca Bernard, “lo de ayer se podía entender”, decía, sino también abordará en la cita el
proyecto urbanístico del entorno de la estación de Santa Justa, puesto que ya anunció que se revisaría el firmado por el anterior Gobierno local de Antonio Muñoz.
Sobre el
temporal, Sanz ha calculado que
a lo largo de la semana la ciudad volverá a la
normalidad tras el paso de la borrasca Bernard, recordando que en cualquier zona de la ciudad se puede ver su rastro y que los
parques de la ciudad se irán
abriendo de forma progresiva, una vez que se evalúe el estado de cada uno, según han puntualizado fuentes municipales.
El alcalde también ha confirmado ante los directivos que
la próxima semana se presentará el
borrador del presupuestos para 2024, que ha insistido en que podrá ser votable por cualquier grupo municipal si anteponen los intereses de la ciudad, y ha anunciado su
intención de reunirse con todos los partidos para intentar conseguir “el
mayor consenso político” para la “Sevilla del día a día y la Sevilla del futuro”.
Ante los empresarios ha defendido que la
plantilla del Ayuntamiento “no está sobredimensionada” y que sería “eficiente si tiene el impulso político de un alcalde o un delegado”, porque a su juicio, “
si el político no empuja, la administración estaría sólo para pagar nóminas”.
Sí que ha defendido que se necesitan
incrementar en 500 los agentes de la Policía Local, cifra similar que estima que faltan en la Policía Nacional, y ha apuntado que, ante sucesos como el
vandalismo en la plaza de Santa Marta, lo ha vinculado a la
falta de civismo, el déficit de agentes y la ausencia de zonas con videovigilancia.
“
La noche más peligrosa no es Nochevieja, es la noche de
Halloween, una fiesta importada en la que uno puede
disfrazarse con una catana y que esa catana sea de verdad”, ha apuntado, recordando que el año pasado se produjeron incidentes, que se evitarán este año, en
Los Remedios con “pandillitas” que se solventaron porque “gracias a Dios la
Policía Nacional había previsto sus unidades antidisturbios, porque la Local sólo tenía cuatro patrulleros”.
Con respecto a las
infraestructuras, ha asegurado que será
“guerrillero” ante el Gobierno central, cuya constitución están esperando, para reclamarle déficit históricos como la conclusión de la
SE-40, el cierre del
anillo de Cercanías o la
conexión ferroviaria de Santa Justa
con el aeropuerto de San Pablo, reiterando que hay una directiva de la UE que obligaría al Estado a que este último proyecto estuviera finalizado en 2030.
Ha defendido la necesidad de que Sevilla sea
atractiva a la inversión ante la
excesiva dependencia que tiene la economía
del turismo y ha apuntado sobre los
pisos turísticos que “lo mejor que han traído es la
rehabilitación del casco histórico” de edificios que “se hubieran caído”, apuntando que esperan que antes de finales de año se apruebe el
decreto de viviendas turísticas “
para regular y atacar a los ilegales, que son los que generan los problemas”.
También ha señalado que lo que se han encontrado en el
Ayuntamiento de Sevilla es “
dejadez, no es ni mala gestión, no nos hemos encontrado casos de corrupción”, con una administración
sin adaptar a la Ley de Grandes Ciudades, con un solo interventor y un solo secretario que supone “un cuello de botella” cuando Valencia, por ejemplo, tiene nueve funcionarios para esos aspectos.
Ha defendido el
“potencial brutal” que tiene la ciudad en el
aspecto universitario y que su idea
no es sólo atraer el talento sino retenerlo, para lo que quiere solventar la falta de
vivienda acabando con el “atasco urbanístico” y
captar inversiones para que las empresas creen empleo y de calidad.