La Policía Nacional ha detenido a dos personas como máximos responsables de una organización que explotaba laboralmente a ciudadanos extranjeros en empresas y explotaciones agrarias en Dos Hermanas (Sevilla), a los que no tenía dados de alta y que trabajaban semidescalzos o en chanclas y con un descanso de apenas diez minutos para beber agua.
En la operación han sido detenidas dos personas y una tercera ha sido investigada como máximos responsables de la organización, a los que se les atribuye un delito contra los derechos de los trabajadores, ha informado este martes la policía en un comunicado.
La investigación comenzó cuando la Policía Nacional tuvo conocimiento de que en una finca de la localidad sevillana de Dos Hermanas se pudiera estar cometiendo un delito contra los derechos de los trabajadores.
Los agentes, junto con la Inspección Provincial de Trabajo, comprobaron que en la finca había una cuadrilla de unas 40 personas que, al percatarse de la presencia policial, salieron huyendo campo a través, aunque fueron finalmente alcanzados por los agentes.
Se pudo entonces comprobar que estas 37 personas estaban procediendo a la recogida de la aceituna en unas pésimas condiciones laborales encontrándose la mayoría de ellos semidescalzos con calcetines o en chanclas, sin contrato de trabajo ni alta en la Seguridad Social.
Manifestaron que su jornada empezaba a las 06:00 horas de la mañana cuando se les recogía en diferentes vehículos y se les trasladaba a la finca sin saber hasta el último momento el lugar de trabajo, ni las condiciones del mismo; siguiendo su jornada sin descanso hasta las 18:00 horas con escasos 10 minutos para beber agua y comer algo mientras estaban siendo vigilados por los “manijeros” de la cuadrilla.
Los agentes pudieron comprobar que de las 37 personas que conformaban esta cuadrilla, 33 eran ciudadanos extranjeros y diecisiete de ellos se encontraban en situación irregular en el territorio español.
Como resultado de esta primera fase del operativo se continuó con la investigación, en la que finalmente se consiguió detener a dos personas, quienes se encargaban de la contratación de personal, junto con un investigado, propietario de la finca como responsables de un delito contra los derechos de los trabajadores.